Una sabrosa palmera gigante de chocolate para endulzar la agria relación que en la historia reciente ha mantenido la afición del Unicaja con el responsable de la Euroliga, Jordi Bertomeu. Es la propuesta, traída al Martín Carpena, de varios aficionados que, en la llamada "Curva Chufla", animan al equipo malagueño. Una gran palmera de "Casa Kiki" para hacer las paces con Bertomeu.

Y es que nadie olvida en el Palacio de los Deportes los desaires del responsable del torneo con el Unicaja, al que dejó sin Licencia A y que se vio fuera de la remodelada Euroliga. Eso trajo, en la última temporada del equipo malagueño en la competición, pitos, mucho ruido y una mala relación con Bertomeu. El Carpena se llenó de pancartas y se imprimieron billetes de dólar con la cara del ejecutivo catalán.

La "Curva Chufla" quiere olvidar ese episodio y trajo al debut del Unicaja en la competición ante el campeón Fenerbahce una gran palmera con el rostro de Bertomeu y una frase: "Era broma". Que no falte el buen rollo en el Carpena. Y, por supuesto, que se hagan las paces con Bertomeu y que el Unicaja entre en la futura ampliación del torneo.