«Livio Jean-Charles se incorpora por la lesión de Shermadini». Así anunciaba el Unicaja, el pasado 18 de marzo, la contratación del ala-pívot francés con un contrato temporal de dos meses ampliables a toda la temporada. El ex de los San Antonio Spurs, de 24 años y 2,04 metros, llegó a Málaga en los siguientes días y fue presentado oficialmente como jugador verde. Esta semana se cumple el contrato del jugador galo en el Unicaja y el club deberá decidir si hace efectiva la cláusula para continuar hasta final de curso o si deja marchar al jugador.
La palabra la tienen ahora Joan Plaza y Carlos Jiménez, que en la última reestructuración del club dejó de ser secretario técnico para ascender al cargo de director deportivo, con lo que aumenta su cuota de decisión y de poder. Livio ha sido un jugador que ha ayudado mucho en los entrenamientos y que, puntualmente, ha sido utilizado por Plaza para paliar la baja de Giorgi Shermadini.
Una vez recuperado el pívot georgiano y con Brooks recuperado de su susto en Valencia, Jean-Charles se queda sin sitio en el equipo. Salvo que Plaza tenga en mente una revolución con la salida de algún exterior comunitario, lo lógico es que el jugador abandone la disciplina verde. Los play off están ya a la vuelta de la esquina y justo un día antes de que arranquen hay que dar el listado de 12 jugadores, que ya no se podrá cambiar más. Poco o nada se entrena en esta fase del curso, por lo que su continuidad parece muy complicada. Plaza le dio una oportunidad en su puesto natural de «cuatro» en Las Palmas y el equipo jugó allí su peor partido del curso en la Liga Endesa. En su etapa en el Unicaja, Jean-Charles ha disputado ocho partidos, con un promedio de 12:59 minutos de juego, con 4,6 puntos, 3,1 rebotes y 5,8 de valoración.
