Rubén Domínguez, el canterano nacional que más ha mimado el Unicaja y el proyecto más interesante para el primer equipo en un margen medio-largo de tiempo, se marcha del club. Su padre le ha comunicado al club malagueño que deja el Unicaja, donde llegó en 2014, para enrolarse con el Torrelodones de Madrid, un club que ya ha "robado" algún joven valor al club malagueño.

Domínguez es natural del Puerto Real (Cádiz) y el Unicaja le reclutó siendo un yogurín, en la temporada 2014. Desde entonces, el club le ha mimado con especial cariño, ya que llegó a Málaga siendo un niño. Y aquí ha ido quemando etapas y creciendo, hasta el punto de ser el jugador que más llama la atención de la cantera. Su impacto es tal, que Rubén es el jugador que más Minicopas ACB ha jugado en la historia del torneo, con tres Minicopas a sus espaldas: Gran Canaria 2015, La Coruña 2016 y Vitoria 2017.

Rubén Domínguez, ya en edad cadete, le ha transmitido al club, según ha informado Málaga Hoy y constató este periódico, que abandona el equipo malagueño, creando un profundo malestar en la entidad. Manolo Bazán, entrenador del infantil, ha sido una especie de padre para él, ya que el responsable del club de los chicos que están en la Universidad Laboral le ha cuidado los cinco últimos años.

El gaditano llegó a Málaga en una edad muy temprana, algo que el Unicaja no suele hacer. Pero sus tremendas perspectivas hicieron que el club verde moviera ficha para ficharle. Rubén, un alero que puede jugar en todas las posiciones del campo, mide a sus 15 años 1,90 metros, y se marcha al Torrelodones. Así se lo ha comunicado el padre del jugador al jefe de la cantera, Ramón García.

El club madrieño está apostando fuerte por la cantera y está "pescando" en el Unicaja. Hace unos años fichó al entrenador de cantera Alberto Oña y después se llevó al infantil Victor Chuka, otro de los jóvenes talentos de la cantera verde. Ahora es Domínguez el que se va. Una baja muy dolorosa para la cantera del Unicaja.