El Unicaja ha acelerado las negociaciones para contratar al base-escolta serbio Nikola Radicevic, jugador con el que el club quiere equilibrar el juego exterior, apuntalando el puesto de base con un hombre que, gracias a su buen conocimiento del juego y su altura (1,97 metros), puede también actuar como escolta, junto a un base más vertical y anotador a su lado, que es la pretensión del club malagueño.

Los contactos con Radicevic, anunciados por La Opinión esta semana, han entrado en una nueva fase y ya han dado paso a conversaciones bastante más precisas sobre sueldos, años y detalles de un futuro contrato que dejan ver que el Unicaja va muy en serio en la apuesta por Radivevic. Un jugador al que Luis Casimiro conoce muy bien. El nuevo entrenador del Unicaja lo tuvo en Sevilla hace tres temporadas y este curso, en el mes de enero, le repescó para el Gran Canaria, donde jugó el segundo tramo de ACB y Eurocup, además de la Copa del Rey.

El serbio (25 de abril de 1994) mide 1,97 metros de altura y conoce bien la Liga Endesa, la Eurocup y la Euroliga. «Niko» se formó en el Partizán de Belgrado y el ya exCajasol le reclutó siendo todavía muy joven, tras ser incluido en el quinteto ideal del Campeonato de Europa júnior de 2012, con un contrato por cinco temporadas. En Sevilla estuvo ya a las órdenes de Luis Casimiro, que le tuvo un año y medio, al final del curso 2014/15 y en 2015/16. El serbio ha ido creciendo, fue elegido en el puesto 57 del draft de la NBA 2015 por los Denver Nuggets y el pasado verano, Radicevic y el Real Betis cortaron su relación. El jugador fichó por el Estrella Roja, pero en enero se enroló con el Herbalife.

El jugador zurdo puede hacer muchas cosas, aunque no es ni un anotador ni un gran tirador. Radicevic es un buen jugador de equipo, que equilibra el juego y hace jugar a sus compañeros. El base domina el pick and roll. Ahí, puede pararse en seco para lanzar en suspensión con su zurda, puede doblar para generar un tiro liberado de un compañero o penetrar hasta debajo de canasta para anotar con una bandeja o asistir a su pívot en la ayuda del dos contra uno.

El problema con Radicevic es que el acuerdo con el jugador no cerrará su fichaje por el Unicaja. El serbio acabó la pasada temporada en el Herbalife Gran Canaria, por lo que el Granca puede realizarle una oferta cualificada por su ficha de esta temperada y presentarla a la ACB para inscribir al jugador en el tanteo. El club insular debe depositarla antes de la medianoche del lunes al martes, y el martes día 3, la ACB informará si el jugador es libre o está en tanteo. Si el Granca se queda con sus derechos y hace la oferta, el Unicaja tendrá del 3 al 14 de julio para presentar su contrato con Radicevic en la ACB. El Granca tendrá cinco días para igualarla y quedarse con Radicevic o renunciar a él, como sucedió el pasado año con el finés Sasu Salin.

Casimiro quiere que Radicevic dé estabilidad al juego exterior verde, ya que cuenta con Alberto Díaz y espera el fichaje de un base americano, anotador, vertical, que le dé muchos puntos al Unicaja, aunque se pierda dirección de juego, algo que compensaría Radicevic. El serbio, gracias a su altura y fundamentos, puede jugar junto a ese base americano, como escolta y, por supuesto, daría minutos de rotación y cubriría lesiones o bajos estados de forma tanto de los bases como de los escoltas. El Unicaja cuenta ya con sus cuatro exteriores: Salin y Milosavljevic (escoltas) y Díez y Waczynski, y sólo necesita fichar a un base de primerísimo nivel y a un combo (Radicevic) que complemente a los demás.

Ese combo, aunque Radicevic es más un base que un escolta, puede ser el serbio, con el que ya hay negociaciones emprendidas, según han garantizado varias fuentes a este periódico. La clave es el Herbalife y el tanteo. Que lo puede retrasar e incluso, anular. La cuenta atrás ha empezado.