El Unicaja inició ayer lunes una nueva semana de trabajo, la más atípica de esta pretemporada. La disputa durante los próximos días de partidos internacionales debido al nuevo parón por las «Ventanas FIBA» ha provocado que hasta siete jugadores del equipo malagueño hayan abandonado por unos días la pretemporada verde. Para ellos, el Unicaja forma ahora parte de un paréntesis en el que intentarán ayudar a sus selecciones en sus compromisos clasificatorios para el Mundobásket de China 2019.

Luis Casimiro Palomo tiene que decirle hasta luego hasta a siete jugadores: Alberto Díaz y Jaime Fernández (España), Sasu Salin (Finlandia), Adam Waczynski (Polonia), Dragan Milosavljevic (Serbia), Giorgi Shermadini (Georgia) y Mathias Lessort (Francia). Para compensar esta catarata de ausencias, el entrenador cajista dará más protagonismo a Morgan Stilma y ha incorporado a seis júniors del equipo EBA: Alessandro Scariolo, Lucas Muñoz, Javier Rodríguez, Ismael Tamba, Matheus Maciel y Jeffry Dodspower.

Bajo este desolador panorama, el Unicaja tendrá que jugar el prestigioso Torneo Costa del Sol, que se disputa esta semana y supondrá una nueva prueba para los verdes. Los hombres de Casimiro jugarán el jueves, en Arroyo de la Miel, ante el Olympiacos de El Pireo. Tras este primer test, el sábado se desplazarán a Marbella para verse las caras con el Real Madrid, también a las 20.00 horas. Dos partidos muy exigentes y con muchísimas bajas. Aunque el Unicaja no es el único perjudicado por este virus FIBA.

El primer rival malagueño será el Olympiacos, que aterrizará en la Costa del Sol con las mismas ausencias que el equipo cajista. El equipo de David Blatt tiene también siete internacionales que se perderán la cita costasoleña. Los griegos Vangelis Mantzaris, Nikola Milutinov, Kostas Papanikolau y Giorgos Printezis están ya concentrados con la selección helena. Cuatro puntales del equipo de El Pireo a los que se les unen, también, el escolta letón Janis Strelnieks y su compatriota Janis Timma, ex del Baskonia, además del búlgaro Sasha Vezenkov, que ha militado las últimas temporadas en el FC Barcelona.

Blatt tiene muchas complicaciones también para poder traer a Málaga un equipo medianamente competitivo, aunque no tantas como Casimiro. El Olympiacos tiene una plantilla más larga que la del Unicaja, para jugar en la Euroliga, y contará con ocho jugadores del primer equipo, a pesar de las ausencias. El técnico estadounidense podrá contar además con jugadores americanos que reforzarán expresamente al equipo para este torneo, y que así ganan visibilidad y se mantienen en buena forma a la espera de que les lleguen buenas ofertas.

El escolta exNBA Manny Harris o el ala-pívot Clint Chapman van a reforzar, en principio, al Olympiacos. También el veterano Fotis Lampropoulos (34 años) vendrá con los rojos. El pívot finalizó su contrato con el Boca Juniors de Argentina y ahora busca equipo. Mientras, se entrena con el club de El Pireo y jugará el Torneo Costa del Sol. Un caso similar al de otro veterano, el serbio Nemanja Milosevic. Además, Blatt va a tirar de sus jóvenes talentos, como el griego Andreas Tsoumanis y el serbio Aleksej Pokusevski, ambos del 2001. Eso sí, la afición malagueña podrá ver de cerca a todo un mito del básket: Vassilis Spanoulis.

Quien tiene menos problemas para configurar un equipo de máximo nivel es el Real Madrid. Los blancos tendrán, eso sí, cinco ausencias. Pablo Laso conserva su núcleo de españoles, con Sergio Llull, Rudy Fernández y Felipe Reyes, con un juego interior muy poderoso, con Walter Tavares, Trey Thompkins o el excajista Ognjen Kuzmic. Laso tendrá las bajas de los argentinos Facundo Campazzo y el joven Gabriel Deck, del mexicano Gustavo Ayón, del nacional Yusta y del americano nacionalizado esloveno Anthony Randolph. El tirador Klemen Prepelic sí estará en el Costa del Sol, al igual que los jóvenes Melwin Pantzar y la joyita Usman Garuba.