El ala-pívot canadiense del Unicaja Kyle Wiltjer, fichado esta temporada del Olympiacos griego, afirmó ayer en una entrevista distribuida por las redes sociales del club que está «encantado de jugar en el Unicaja», adonde llegó por consejo de su amigo, el excajista Domantas Sabonis, hoy en los Pacers de Indiana.

Tras pasar por las universidades de Kentucky y Gonzaga, en donde compartió vestuario con Sabonis, con quien le une una gran amistad, Wiltjer comenzó su andadura profesional en 2016 en los Houston Rockets en la NBA, llegando al Olympiacos griego la temporada pasada, en donde mostró sus excelsas rachas de tiro.

Wiltjer es hijo de Greg Wiltjer, que militó en el Barcelona, Cajamadrid y Argal Huesca entre 1985 y 1987. El jugador cajista ha disputado hasta estos momentos 18 partidos con una media de 11,83 puntos y es un especialista en triples, si bien reconoció que, como su padre «nunca tiró un triple», le envió a un montón de campus de tiro «para que fuera capaz de hacerlo».

Abundó en las enseñanzas de su padre, quien le legó «muchos de sus recursos» y afirmó que «ser capaz de jugar a un alto nivel en Europa y en la ACB es un sueño» que ha hecho realidad en Unicaja, equipo «con un montón de potencial», que ha tenido «un gran inicio» y que, como dice su entrenador, Luis Casimiro, tiene que «seguir trabajando duro», finalizó.