Día grande en el Carpena. El Unicaja, invicto en casa en lo que va de temporada, y el Barcelona, líder de la Liga Endesa, se citan esta tarde-noche, a partir de las 19.30h., en uno de los partidos más esperados cada temporada por la «marea verde». Y es que los Unicaja-Barça hace mucho tiempo que son partidos «especiales» en Málaga. Desde aquel día del triple que no entró de Michael Ansley en Ciudad Jardín, la visita del equipo culé es siempre «algo más que un partido».

Han pasado la friolera de 23 años desde entonces, pero nadie de los que estuvieron aquel día en Ciudad Jardín o de los que lo vimos por la tele lo hemos olvidado. Los 5.000 de la cancha y las decenas de miles que nos sentamos delante de los televisores sabemos qué hicimos aquel día antes del partido, con quién vimos aquel día aquel encuentro e incluso dónde fuimos y qué hicimos después de que aquel partido acabara con el triple fallado más importante en la historia de este club.

Aquella noche nació una rivalidad que ha perdurado con el paso de los años, de los jugadores, de los entrenadores o de los presidentes, y que tuvo otro capítulo muy «especial» aquella otra noche de 2007, ya en el Martín Carpena, en la que Pepe Sánchez sí acertó con un triple que llevó al Unicaja de Sergio Scariolo a la Final Four de la Euroliga de Atenas a costa del Barcelona de Dusko Ivanovic.

Citas históricas al margen, lo cierto es que este Unicaja-Barcelona de diciembre de 2018 apunta a partidazo. El Barça llega al Carpena en su mejor momento en varios años. Los de Svetislav Pesic aterrizan en Málaga líderes de la Liga, con 10 victorias en 11 jornadas. Solo el Fuenlabrada ha sido capaz en lo que va de Liga de frenar la máquina culé. Claro que el Unicaja tampoco se puede quejar, tras un balance 8-3 y sabiéndose hasta ahora invencible en su Palacio.

Con ambos equipos clasificados virtualmente para la Copa del Rey, en juego hay hoy una victoria que a los verdes les dejaría muy cerca de su objetivo de afrontar el sorteo copero en el bombo de los cabezas de serie, mientras que a los del Palau les daría el pase ya matemático a la cita de Madrid y les permitía, una semana más, mirar por encima del hombro a Baskonia y Real Madrid, los otros dos equipos que luchan por el liderato en este sprint final de la primera vuelta.

En un día «especial», el ambiente también será «especial». Eso sí, salvo que hoy haya un buen arreón final, no habrá llenazo en el Carpena. El «No hay billetes» no va a ser posible por unos pocos cientos de entradas, pero está asegurado el mejor feeling en las gradas de lo que va de curso, con más de 9.000 espectadores tirando del equipo.

Para el Unicaja será un examen muy serio. Después del parón por las «Ventanas FIBA», los verdes acumulan dos derrotas seguidas (Badalona y Kazán), su peor racha desde que arrancó la temporada. El equipo parece haber perdido algo de chispa, hay una cierta desconexión que hoy es de obligado cumplimiento superar si es que el Unicaja tiene la más mínima intención de ganar al líder de la Liga.

Luis Casimiro tiene a todo el equipo en condiciones. Alberto Díaz, todavía fuera de forma, jugará su tercer partido tras la lesión. El base canterano está cada día un poco mejor y hoy será importante para el equipo si puede dar un paso adelante. Vuelve también, tras su baja en Kazán, Carlos Suárez. El capi ha superado su leve esguince de tobillo y podrá jugar contra los azulgranas. Su veteranía, su saber estar y su conocimiento del juego siempre son fundamentales para el equipo.

El Barcelona tampoco tiene bajas más allá de la de Kevin Seraphin en su plantilla de 13 jugadores. Los cupés han formado este arranque de temporada un grupo sin fisuras en el que primera el colectivo sobre lo individual. «Ojo» al dato: Ningún jugador del Barcelona está entre los 15 primeros de la Liga en valoración, en anotación o en rebotes totales. Ninguno, a pesar de que el equipo es líder de la ACB y está en el Top 3 de casi todos los apartados estadísticos importantes del juego. Heurtel es el décimo en asistencias y Singleton es el tercero recuperando balones. Más allá de ellos, no busquen otros nombres propios de jugadores blaugranas entre las estadísticas ligueras. O sea, que en este Barça todos son importantes y cualquiera te puede «matar».

Lo dicho, huele que apesta a partidazo. A duelo en la cumbre. El que no tenga entrada, todavía está a tiempo. El que vaya no se va a arrepentir. Eso se lo seguro yo.