Un último cuarto imperial del Unicaja, tras estar los primeros 30 minutos a remolque del Delteco GBC (aunque es verdad que siempre con un marcador más o menos equilibrado), le sirvió al equipo verde este sábado en plenas fiestas navideñas para sumar en la pista del colista de la Liga Endesa una victoria trabajada, que vale su peso en oro en este esprint final de la primera vuelta camino de la Copa del Rey y del reparto de bombos de cara al sorteo de esa cita del k.o de Madrid 2019.

El Unicaja cumplió con el guión ante un rival que aguantó muy bien 30 minutos, que nunca se dio por vencido, pero que acabó rendido y sin fuelle a la evidencia de la diferencia física, de presupuesto, objetivos y recursos humanos que hay entre un equipo que aspira a jugar finales (el verde) y otro (los vascos) que su único objetivo esta temporada es buscar dos equipos que lo hagan peor al final de la Liga Regular para evitar caer al pozo de la LEB Oro.

Después de lo del día del Baskonia, era importante ayer estar bien. Ganar en Donosti era una obligación y ofrecer una buena imagen, un objetivo paralelo. La primera premisa de la ecuación se cumplió. ¿La segunda?, pues según el grado de exigencia que le ponga cada uno al equipo. Yo creo que el Unicaja no hizo en el San Sebastián Arena 2016 un buen partido, pero tampoco se puede negar que supo leer el juego, esperó su momento, siempre dio impresión de tener controlada la situación y no sufrió mucho en los minutos finales para lograr el objetivo ante un rival, hay que decirlo, con mejor imagen y sensaciones que resultados.

Esta vez el equipo no echó tanto en falta a Carlos Suárez. Y eso que su compañero de puesto, Kyle Wiltjer, no atraviesa por un buen momento. Es una pena que con el capitán fuera por lesión, haya llegado este bajón del internacional canadiense. Esta vez Dani Díez estuvo mejor en el 4» que el propio Wiltjer. El resto tuvo su momento de gloria, incluido el canterano Morgan Stilma, que debutó en el Liga Endesa para jugar los últimos 54 segundos. Mención especial, por cierto, para dos triples desde la esquina de Milosavljevic, que acabaron de «matar» al rival en ese letal último cuarto.

La victoria, la décima del curso, todavía no vale para celebrar el billete copero. Es una pura cuestión matemática. Si el Unicaja perdiera los tres partidos que le faltan de esta primera vuelta y los rivales que vienen por detrás los ganaran, el equipo de Luis Casimiro todavía podría bajar a la octava plaza y quedarse fuera de la cita del k.o. Es virtualmente imposible que pase algo así, pero como las matemáticas todavía permiten esa hipotética carambola maligna, hay que esperar a la primera jornada de 2019 para que la clasificación copera de los cajistas sea un hecho. Entonces, habrá que echar otras cuentas, las de ser cabeza de serie, objetivo «real» para los de Luis Casimiro en este esprint final de la primera vuelta liguera.

Fue un partido intenso, con más emoción que buen juego, en el que el Unicaja fue a remolque casi siempre hasta ese parcial demoledor del último cuarto. Al colista de la Liga le faltó fuelle justo cuando la máquina verde comenzó a mostrar lo mejor de sí misma. El resultado, un 80-94 que no hace justicia a lo mostrado por unos y otros sobre el parqué.

Se acaba ya 2018. Ha sido un año bueno en líneas generales para el Unicaja, sobre todo en esta segunda parte, con el nuevo proyecto de Luis Casimiro en marcha. Ahora toca resetear porque nada más que pasen las campanadas, el día 2 empieza el Top 16 de la Eurocup en La Fonteta de Valencia. La segunda fase continental toma el protagonismo. Vienen emociones fuertes.

Ficha

80.- Delteco Gipuzkoa Basket: Nevells (13), Dani Pérez (8), Corbacho (12), Burjanadze (15), Barro (4)- cinco inicial- Jorge Gutiérrez (7), Bobrov (8), Sekulic (11), Salvó (2), Van Lacke, Oroz y Maiza.

94.- Unicaja: Salin (10), Roberts (14), Waczinski (6), Wiljer (7), Shermadini (14)- cinco inicial- Fernández (13), Díez (5), Díaz (2), Stilma, Milosavljevic (8), Lessort (14). Okouo (1)

Árbitros: García González, García Ortiz y Zamorano.

Marcadores por cuartos: 28-25; 45-41; 68-66; 80-94.

Incidencias: 2.316 espectadores en el Donostia San Sebastián Arena.