Ryan Boatright está librando una carrera a contrarreloj para poder ser inscrito este viernes en la ACB y así poder debutar este sábado en el encuentro que medirá al Unicaja con el Movistar Estudiantes en el José María Martín Carpena (18.00 horas). El Unicaja anunció el martes al mediodía un «principio de acuerdo» con el base estadounidense, y fue durante esa misma mañana en la que liberó los 50.000 dólares que debe abonar para liberar a Boatright de su contrato con los Texas Legends de la G-League de la NBA.

Este tipo de transacciones duran entre dos y tres días, pero anoche aún no había noticias de que la GLeague había ya recepcionado el dinero y, por lo tanto, se había tramitado ya su libertad. De hecho, el propio Unicaja no ha querido realizar todavía la presentación oficial del base ante los medios de comunicación. El club quiere esperar a poder tener toda la documentación en su poder, aunque el problema que el plazo para inscribir jugadores en la Liga Endesa para esta jornada expira esta tarde a las 20.00 horas. Si el club no posee su tránsfer no podrá dar de alta al jugador estadounidense que, por lo tanto, no podría debutar contra el Estudiantes.

El jugador está como loco por jugar ya con el equipo malagueño. Ryan Boatright pasó el miércoles todos los controles médicos y este jueves ya se entrenó con sus nuevos compañeros. El jugador de 26 años ha firmado un contrato hasta final de temporada y con él, el Unicaja espera recuperar frescura y anotación. El base volverá a entrenarse este viernes con el equipo, a la espera de que se resuelva todo el papeleo. Él quiere jugar ya contra el Estudiantes, pero si no se le puede inscribir en la ACB no lo podrá hacer. Tampoco podrá debutar el martes ante el Limoges, ya que la Eurocup ha cerrado el mercado y no lo abrirá hasta la semana que viene, cuando acabe la primera vuelta del Top 16.

El base, de 1,86 metros de altura, jugó hace dos cursos en el Cedevita croata, con el que ganó la Liga y la Copa de Croacia, y fue subcampeón de la Liga Adriática. Llegó a medirse al Unicaja en el Top 16 de la Eurocup, que posteriormente el equipo malagueño acbabó ganando. Tras una experiencia en Turquía regresó a su país para militar en varios equipos de la G-League. Ahora llega a Málaga para aportar puntos, aunque con él no se subsanarán los problemas en defensa.