Luis Casimiro era un entrenador feliz al acabar el Unicaja-Baxi Manresa. "Sobre todo por las dos victorias, estoy contentísimo, pero me sirve para disfrutarlo hoy. Abrimos el paréntesis ahora por la Copa estando en cuarta posición, habiendo recobrado muy buenas sensaciones de juego anotación y siendo nosotros mismos. A partir de mañana a pensar en Tenerife y la dificultad para ganarle", aseguró el coach.

Casimiro analízó así el partido: "Creo que fue un gran partido. Cuando haces 115 de valoración y 99 puntos con los porcentajes que has hecho es un grandísimo partido. Jugando contra un muy buen equipo, que juega muy bien y no le regalaron las 11 victorias. Se llama Baxi, si tuviera otro nombre diríamos que estamos ante un partidazo. Mi profunda admiración por lo que están haciendo. Fuimos capaces de sufrir. Llegamos a esa situación por dos triplazos de mucho mérito de ellos, bien defendidos, pero el equipo estuvo bien".

Como es inevitable, la Copa del Rey ya centra toda la atención en el entorno cajista. "La Copa es la Copa. Está muy bien por recuperar la cuarta posición, ponernos a una victoria del que está por encima. Eso es lo mejor y lo más importante. Pero de nada sirven las dinámicas en la Copa, el campeón del año pasado era el que llegaba en peor dinámica. Cada partido es a vida o muerte", explicó el manchego.

El técnico bromeó sobre los finales apretados: "Tenéis que hacer deporte y tener el corazón fuerte. Yo salgo a correr para que el corazón resista. El público se lo pasa bien y al equipo le da confianza", afirmó.

El nombre propio de cara a la próxima semana es Carlos Suárez, que es duda para la Copa por esa lesión muscular que le mantiene ya casi dos meses de baja: "A ver la semana que viene. No me han dicho nada, le están haciendo bastantes pruebas. Vamos a esperar, nos quedan cuatro días, está al final de la recuperación. Él estará por arriesgar, pero el riesgo que corremos es importante. Hay que sopesar".