El Novotel Madrid Center se ha convertido estos últimos cuatro días en el verdadero cuartel general de la Copa del Rey 2019 de Madrid que ayer echó el cierre en el Wizink Center. Los ocho equipos que han participado en el torneo del k.o. han estado concentrados en el hotel, a apenas 150 metros del pabellón de la Comunidad de Madrid, donde se han disputado los siete partidos que ayer pusieron nombre al campeón de esta edición. Todo aquel que es alguien en el mundillo del baloncesto español ha pisado el Novotel en este largo fin de semana, desde que el miércoles por la tarde-noche llegaron los ocho equipos.

Los agentes, principalmente, aprovechan estos días para trazar puentes y tener una toma de contactos con los clubes. Ha sido el caso del Unicaja, como no podía ser de otra forma. El presidene del club, Eduardo García, ha tenido una agenda muy apretada, junto al director deportivo, Carlos Jiménez. Las reuniones con los agentes se han sucedido, porque no hay que dejarse llevar por el «bajón» vivido por la eliminación copera. La vida sigue y en la Copa se habla de presente y también de futuro.

A día de hoy, el gran «cliente» para el Unicaja es BEOBasket y Misko Raznatovic, ya que en el Unicaja hay en este momento hasta tres jugadores que cumplen contrato en junio y que son de la agencia del serbio: Dragan Milosavljevic, Mathias Lessort y Gio Shermadini. Los tres jugadores, todos importantes en este Unicaja, pertenences al Rey Midas del básket europeo. De hecho, el presidente se reunió con Raznatovic y con su hombre de confianza en España, Moisés Cohen, el miércoles por la noche en el Novotel. El club tiene que plantearse qué hacer con tres jugadores que tienen un peso específico importante, que son caros y cuyo rendimiento está siendo positivo. Aunque con Raznatovic nunca se sabe, y él puede encontrar mercado para cualquiera de ellos fuera de Málaga.

En importancia en este Unicaja siguen después los jugadores nacionales, y ese es coto casi exclusivo de Romaior Sports y de José Ortiz. El agente lleva los asuntos de Dani Díez y Carlos Suárez, además de Adam Waczynski, aunque en este caso con un socio de Ortiz. Para ellos, máxima tranquilidad, ya que todos tienen contrato por más temporadas con el equipo malagueño. Aunque sí es cierto que está por resolver el «fleco» del capitán y con el polaco hay un cierto malestar por su baja forma.

El club y el ala-pívot madrileño tienen una opción este verano para ampliar su contrato dos temporadas más o bien para cortar la relación. Como informó hace ya algún tiempo La Opinión, el Unicaja no sólo quiere que el ala-pívot siga, sino que incluso quiere activar ya esa cláusula para evitar especulaciones y consolidar su relación con el «capi».

Y también hay trabajo por delante con una agencia con la que el Unicaja trabaja últimamente mucho, Hoops Internacional, con Paco López y Álvaro Tor, y su vinculación a la estadounidense Priority. Hace un mes llegó de su mano Ryan Boatright y en verano aterrizó Kyle Wiltjer.

Después de algún tiempo sin trabajar con Rade Filipovic y Quique Villalobos, de BDA Sport, el club lo hizo en verano al fichar a Jaime Fernández, que está siendo una de las grandes revelaciones de la temporada. Sus dos años más de contrato y sus 750.000 euros de cláusula dejan tranquilos al Unicaja, consciente de que necesita darle una vuelta al contrato, porque la ficha de Jaime es una de las más bajas de la plantilla verde.

Nombres sobre la mesa, nombres propios de una plantilla en la que también tiene cuota el agente Arturo Ortega, con Alberto Díaz y Viny Okouo, que acaba contrato. Como también lo hace Sasu Salin.