Los representantes de las tres instituciones de Málaga (Ayuntamiento, Junta de Andalucía y Diputación) han acordado con la ACB suscribir el protocolo de intenciones por la Copa del Rey 2020 que obligue a las dos partes a firmar un posterior contrato definitivo durante la primera semana del mes de marzo. El acuerdo está ya totalmente cerrado, tal y como se ha venido informando estos últimos días y confirmó el propio presidente de la ACB, Antonio Martín, en Onda Cero el domingo, coincidiendo con la celebración de la final de la Copa de Madrid.

La intención de las administraciones públicas era haber cerrado ya este protocolo de intenciones este pasado fin de semana en Madrid, pero la pronta eliminación del Unicaja en la Copa hizo que se haya tenido que cambiar de planes.

La concejala de Deportes del Ayuntamiento de Málaga, Elisa Pérez de Siles; el consejero de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, Javier Imbroda; y el diputado de Deportes de la Diputación Provincial de Málaga, Cristóbal Ortega, tenían previsto subir a Madrid el sábado para presenciar unas hipotéticas semifinales del Unicaja. De esta forma, se aprovechaba el viaje hasta la capital de España para firmar ya con los responsables de la ACB este protocolo de intenciones.

Se trata de un documento que obliga ya a las dos partes a la celebración del evento, a expensas ya sólo de la firma del contrato definitivo. Toda esa documentación se firmarán posteriormente, vinculando ya de forma final a la ciudad con la ACB.

Las tres administraciones públicas abonarán el canon que exige la ACB, que es de un millón de euros más IVA, para que el Martín Carpena acoja la gran cita del básket nacional, y el mayor evento deportivo que se celebra en todo el país. Ocho aficiones se reúnen durante cuatro días en una misma sede, donde reina la convivencia y la sana competencia deportiva. Todo un ejemplo de valores.

La ACB también tiene que dar un último paso en su actuación, ya que la Asamblea que componen los 18 integrantes de la Liga tiene que aprobar en votación la elección de Málaga. Se trata de un mero formalismo, ya que en la pasada reunión ya se habló de que existían conversaciones muy avanzadas con la ciudad y no hubo ningún tipo de oposición.

Málaga ha acogido las Copas del Rey de 2001, 2007 y 2014, todas con un rotundo éxito de organización y público. El hecho de que la Copa se celebre en Málaga hace que el Unicaja se clasifique para el torneo del k.o. de forma automática como club anfitrión. Eso sí, la experiencia de los equipos que ejercen como local no suele ser gratificante. Ojalá que cambie.