La enfermería del Unicaja sigue aún con dos inquilinos: Alberto Díaz y Jaime Fernández. Los dos están aún convalecientes de sendas lesiones musculares y todavía el plazo de recuperación es largo. El que más cerca está de reaparecer es el base canterano malagueño. Alberto Díaz sigue trabajando a diario con el preparador físico, Diego Vázquez, y con los fisioterapeutas, Mario Bárbara y Ale Ballesteros, en su proceso de recuperación de su rotura muscular en los isquiotibiales. El jugador se volvió a lesionar en la misma zona en el debut del Top 16 de la Eurocup, el pasado 2 de enero, en La Fuente de San Luis de Valencia.

Alberto se resbaló sobre una pegatina publicitaria en la zona del Unicaja y volvió a lesionarse la misma musculatura que le había tenido de baja desde finales de octubre hasta comienzos de diciembre. Fue un duro varapalo para todos, porque el equipo está carente de su garra competitiva y su fortaleza defensiva.

Alberto sigue en el gimnasio y ya ha comenzado a realizar ejercicios con leve carrera y pequeños cambios de ritmo en el parqué. Su proceso de baja se va a alargar, al menos, dos semanas más. La idea es que en tres semanas ya esté con el equipo trabajando a un nivel aceptable, y que vaya entrando poco a poco en la dinámica del grupo.

No se quiere correr ningún tipo de riesgo con él, porque ya eliminados de la Eurocup, el equipo sólo tiene un partido a la semana en la Liga ACB. Es decir, la idea es que durante el mes de abril vaya adquiriendo tono físico y haga una especie de pretemporada particular, con la intención de que llegue en plenitud de condiciones al mes de mayo, al final de la Fase Regular y al arranque de los play off.

Algo más tiempo va a necesitar Jaime Fernández. El base-escolta madrileño cumple ahora un mes de baja, ya que se lesionó el 14 de febrero, en los cuartos de la Copa del Rey. A Jaime le queda, como mínimo, otro mes más para incorporarse con el grupo, por lo que también se pretende que llegue en las mejores condiciones a mayo.