El Unicaja ya ha comenzado a realizar los primeros movimientos de futuro. El club, pasadas dos terceras partes de la temporada, conoce bien debilidades y puntos fuertes de la plantilla, y a partir de ahora comenzará a trabajar en la búsqueda de jugadores que se adapten a sus necesidades económicas y deportivas. El trabajo de campo de estos próximos meses marcará las decisiones que se tomen en el futuro. Recabar información extra sobre jugadores que interesen se antoja clave para luego tener más capacidad de elección a la hora de recomponer el plantel tras dar altas y bajas.

Una de los puntos negros del actual planten es la ausencia de músculo, tanto dentro como fuera de la zona. En un baloncesto cada vez más físico, el Unicaja. Lo sabe bien el club, que ya ha comenzado con la búsqueda de jugadores que tengan músculo, centímetros y buen lanzamiento de tres para el perímetro. Esos son los requisitos y ahora toca comenzar a cuadrar parámetros, no menos importantes, como el económico y el conocimiento y experiencia en la ACB. Son los requisitos que van a cribarse a la hora de tratar de encontrar ese jugador atlético exterior, que ayude en el rebote y que dé músculos por fuera de la zona.

En el actual Unicaja 2018/19 existe un overbooking de jugadores de similares características por fuera, de ahí la necesidad de fichar otro perfil diferente de jugador. Para el próximo curso tienen contrato garantizado Jaime Fernández, que puede actuar de base y escolta, Adam Waczynski y Dani Díez. Claro que habrá que analizar rendimientos cuando acabe el curso. Sasu Salin y Dragan Milosavljevic acaban contrato, aunque los dos gustan por diferentes motivos y se les planteará opciones para que continúen cuando llegue el momento adecuado.

De los nombres que ya se comienzan a barajar en Los Guindos hay uno que los aficionados del Unicaja conocen muy bien, por desgracia: Stanley Onyekachukwu Okoye. Se trata del alero del Tecnyconta Zaragoza que el pasado domingo masacró al equipo malagueño con 30 puntos, 6 rebotes y 32 de valoración, lo que le llevó a ser el MVP de la jornada en la ACB.

El jugador estadounidense se adapta como un guante a ese perfil que requiere el equipo malagueño para potenciar su juego exterior. Su capacidad atlética está fuera de toda duda, es un excelente reboteador y en su carrera en Europa ronda siempre el 40% de acierto en el tiro de tres. Esta temporada, sin ir más lejos, está en el 42,8%, y eso que lanza cinco triples por encuentro. Para que se hagan una idea, ningún jugador exterior del Unicaja llega a esos porcentajes de acierto, y eso que el Unicaja es el que más tira de tres. El mejor exterior en esa faceta es Adam Waczynski, con el 38,4%.

Su impacto en el rebote, además, también es un factor importante y que le hubiera venido de perlas al actual Unicaja. El alero captura 4,7 rechaces por choque. En el Unicaja sólo le superan Lessort (5,1) y Shermadini (4,8).

Stan Okoye, de 1,98 metros, es el quinto máximo anotador de toda la ACB, con 14,6 puntos de promedio en 24:43 minutos de juego por partido, exactamente el mismo tiempo que juega Jaime Fernández. El estadounidense cumplirá en los próximos días 28 años y ocupa plaza de comunitario ya que, aunque nacido en Raleigh (North Carolina), sus raíces son nigerianas y juega, de hecho, con la selección africana. El pasado verano jugó la Summer League de Las Vegas con los Denver Nuggets. Curtido en la Lega italiana tras salir de EEUU, firmó por una única temporada en Zaragoza, por lo que a buen seguro le saldrán muchos pretendientes, más allá de que el club maño se guarde el derecho de tanteo.