El Unicaja sí sabe defender. Y las últimas cinco jornadas de la Liga Endesa dan buena prueba de ello. Después de arrastrar durante toda la temporada muchísimos problemas a la hora de resguardar su aro, el equipo ha apretado los dientes atrás, de un tiempo a esta parte, haciendo de su defensa un arma importante de su juego.

Los datos son contundentes. Tras jugar y perder 112-95 contra el Baskonia, en Vitoria, el pasado 3 de marzo, hace poco más de un mes, el Unicaja cerraba la jornada 21 de la Liga Endesa con 1.787 puntos encajados, siendo la tercera peor defensa de la ACB, solo por delante de las del Movistar Estudiantes (1.807) y la del Fuenlabrada (1.848).

Con 85.1 puntos de media encajados, la defensa era entonces el principal problema de un Unicaja recién eliminado de la Copa del Rey y a punto de medirse con el Alba de Berlín alemán en el play off de cuartos de final de la Eurocup.

El problema atrás venía de largo. Incluso desde la pretemporada. Y es que el Unicaja firmó unos números muy preocupantes en la fase de preparación previa a la Liga Endesa. En los cinco primeros amistosos, el recién iniciado proyecto de Luis Casimiro firmó cuatro derrotas y ¡91.4 puntos encajados!

El Unicaja recibió más de 92 puntos en cuatro de esos cinco amistosos. En todos, menos en el que ganó al Montakit Fuenlabrada, en Puertollano, tuvo un mejor registro defensivo, encajando «solo» 82. El resto de los rivales mataron a los verdes a base de canastas de todo tipo. El Estudiantes le metió 92, el San Pablo Burgos le endosó 93, el Olympiacos le hizo 94 y el Real Madrid, 96.

Esos problemas no cambiaron en las primeras 21 jornadas de la presente ACB, hasta el punto de que los números cajistas llegaron a ser los peores de los 27 años de historia del club. Pero aquel partido liguero de principios de abril en la cancha del Baskonia supuso un antes y un después para la defensa verde. Desde entonces, el equipo de Luis Casimiro ha jugado cinco partidos más en los que ha rebajado la media de puntos encajados a solo 70.4, prácticamente 15 menos de media. Una barbaridad que, no obstante, solo le ha valido para ganar tres de esos cinco choques porque las visitas a Las Palmas (85-76) y a Zaragoza (72-70) se saldaron con sendas derrotas.

Lo que es evidente es que algo ha cambiado en estas últimas semanas, en las que el equipo ha recibido en dos ocasiones 63 puntos, la mejor cifra de toda la temporada. Ha sido, por cierto, en sus dos últimas presencias en el Martín Carpena. Hace tres jornadas ganó 74-63 al Monbus Obradoiro y este pasado fin de semana hizo lo mismo contra el Joventut, 88-63. Dos victorias en las que no hizo falta una gran versión ofensiva del Unicaja al dejar por debajo de 65 puntos a su rival.

Buena prueba de la mejoría de estas últimas jornadas es el «subidón» que ha pegado el equipo en la clasificación de la Mejor Defensa de la Liga, en la que ocupa ahora la novena plaza tras la jornada 26. Es la mejor posición en este importante departamento del juego desde que arrancó la temporada en septiembre. Son en la actualidad 2.139 puntos recibidos, lo que hace una media de 82.2 por encuentro. Por detrás, Andorra, UCAM Murcia, Gipuzkoa Basket, San Pablo Burgos, Cafés Candelas Breogán, Herbalife Gran Canaria, Tecnyconta Zaragoza, Movistar Estudiantes y Montakit Fuenlabrada.

Habrá que ver si el Unicaja consolida esta mejoría en las próximas jornadas. Está en juego la cuarta plaza de la clasificación (que tiene ventaja de campo en el play off de cuartos de final) en un esprint final de temporada que, salvo sorpresa, será un mano a mano entre el Valencia Basket y Unicaja.