El Unicaja retoma este domingo en Lugo la competición en la Liga ACB (19:30/Movistar+), con la vista puesta en el duelo aplazado de la jornada 27, el del próximo miércoles en La Fonteta ante el flamante campeón de la Eurocup, el Valencia Basket (20:30/Movistar +). Pero a pesar de la importancia de un enfrentamiento ya clásico en el continente, los pupilos de Luis Casimiro no podrán descuidarse ante un Cafés Candelas Breogán que va a tener a Ray McCallum.

El exbase cajista apenas ha tenido tiempo de aclimatarse en su nuevo destino, pero en tres partidos jugados, aunque no haya podido contribuir a enderezar el camino del equipo, sí que se ha convertido en uno de los principales argumentos para aspirar a cotas mayores.

En una entrevista concedida al periódico El Progreso de Lugo reconoce que el choque de pasado mañana será diferente: «Es algo especial porque guardo buena relación con compañeros». Y es que compartió vestuario con la plantilla cajista hasta que el pasado verano se marchó con destino a tierras turcas, tras no convencer en su periplo como jugador verde.

Reconoce que su nuevo equipo debe mejorar en defensa para aspirar a alcanzar la permanencia en la Liga ACB. Al mismo tiempo avisa, no obstante, de lo que puede ocurrir este domingo en Lugo: «El equipo tiene un gran potencial y si logramos estar fuertes en defensa y ganar confianza podemos ganar a cualquiera».

Confía además en el factor cancha, después de haber comprobado la «gozada que es jugar en un sitio donde todo el mundo ama el baloncesto». Así lo especifica: «Si la afición aprieta y jugamos juntos y trabajamos en defensa podemos imponernos. Lo importante contra el Unicaja es tener opciones de ganarles».

El cuadro malagueño tendrá en apenas ocho días tres duelos fundamentales para conocer cómo podrá encarar los cruces por el título liguero. Además de los dos partidos lejos del parqué del Carpena, el domingo 28 cerrará este mes de abril contra el San Pablo Burgos, esta vez como local y a partir de las cinco de la tarde.