Hoy no va a ser un día fácil en el Carpena. Y no lo digo por el San Pablo Burgos... que también. Intuyo que no va a ser un día fácil porque el Unicaja, en su peor momento de sensaciones de la temporada, se ve las caras hoy con su afición en medio de un mal rollo general que viene de varias semanas atrás, pero que explotó con los 40 minutos negros del miércoles en Valencia y que tiene a la «Marea Verde» (al menos a los que se manifiestan a través de las redes sociales) de uñas contra todos y contra todo.

El ambiente es el que es, pero Luis Casimiro y su equipo tienen hoy una magnífica oportunidad para frenar esa deriva. Es verdad que solo ganar al San Pablo Burgos no va a servir de antídoto para mitigar todas las críticas en el entorno verde. Pero debe de ser, al menos, el punto de partida para recuperar sensaciones, confianza y esa autoestima que entre unas cosas y otras está ausente del entorno cajista desde hace ya varias semanas. Quizás desde el día copero del Iberostar en Madrid o, si acaso, desde el día del -20 contra el Alba Berlín en el choque del play off europeo en el Palacio.

Yo sé que hoy no es el mejor día para pedir «cariño», pero la afición (siempre soberana, que para eso es la que paga) haría bien en ponerse esta tarde en modo «on» y acudir sin prejuicios al Carpena dispuesta a «morir» con su equipo durante los 40 minutos del partido.

Con un mes de Liga todavía por delante, además del play off, no vale de nada ir al Palacio para murmurar y pitar a entrenador y/o jugadores y/o palco. Son Casimiro, la plantilla y los que mandan los más interesados en sacar al equipo de esta situación. Creo que los silbidos hay que dejarlos (en su caso) para cuando acabe la temporada, que será cuando cada uno tendrá que hacer su propio examen de conciencia y cuando rodarán las cabezas que sean necesarias. Mientras, todos a una seguro que nos/les irá mejor.

Que nadie se olvide, por cierto, de que este mismo Unicaja, con esta misma plantilla, este mismo entrenador, este mismo director deportivo y este mismo presidente hizo un inicio de temporada para enmarcar. Creo sinceramente que no conduce a nada ahora una «caza de brujas», lo que hay que hacer es remar todos a una para recuperar el nivel de octubre, noviembre o diciembre. Y entonces, todo será posible todavía.

En lo estrictamente deportivo, el Unicaja comparece ante los castellanos con la consabida baja de Carlos Suárez, que sigue apartado de la disciplina del equipo por sus problemas musculares. No es una lesión grave, pero su vuelta tardará todavía unos cuantos días más.

Por lo que se refiere al rival, el San Pablo Burgos es uno de los equipos que mejor asiste de la competición (17,64), además del sexto en valoración (90,57) y el tercero en porcentaje de tiros de 2 (56,43%).

En cuanto a jugadores, el alero Dominique Sutton ha revolucionado el equipo castellano en apenas dos meses. La intensidad del estadounidense se ha traducido en 14,8 puntos, 7,2 rebotes, 2 asistencias, 1,8 recuperaciones y 17,8 de valoración que ya le han servido para ser el MVP del mes de Febrero en la Liga Endesa, galardón que compartió con Giorgi Shermadini tras promediar 27 de valoración.

En la zona, Goran Huskic (10,6 puntos, 5,8 rebotes y 14,8 de valoración) y el excajista Augusto Lima (7,6 puntos y 5,3 rebotes) se unen a la versatilidad de Vlatko Cancar (10 puntos, 4,1 rebotes) y el acierto exterior de Bruno Fitipaldo (8,4 puntos, 4,6 asistencias), Branden Frazier (8,4) y Vitor Benite (11,2) como principales amenazas.

La cita es a las 17 horas. En pleno día electoral, el Unicaja bota.