Objetivo cumplido: minutos para los menos habituales, probaturas de Luis Casimiro para lo que está por venir y ningún lesionado en la vuelta a casa. El Unicaja cumplió este martes el trámite de acabar la primera fase de la Eurocup con un partido en Trento en el que no tenía nada en juego y que terminó con una derrota 88-76 inocua para los intereses cajistas en la segunda competición del baloncesto continental.

Los verdes habían hecho los deberes a tiempo. Ya se sabían campeones de grupo antes de arrancar este partido de la jornada 10 y lo único que tenían por delante en estos 40 minutos era tratar de seguir manteniendo la buena dinámica de los partidos anteriores.

¿Qué habría pasado en el caso de que el Unicaja se la hubiera jugado en estos 40 minutos en Italia? Pues me da la impresión de que el desenlace hubiera sido otro muy distinto, aunque eso ya nunca lo sabremos.

Lo que sí se puede decir es que el 88-76 final entra dentro de lo esperado. Y es que cuando en un partido hay un equipo que no se juega nada y otro que se juega la vida, casi el cien por cien de las veces pasa lo que pasó esta vez en el BLM Group Arena. Ellos necesitaban ganar para estar en el Top 16. Perder les obligaba a esperar favores en pistas ajenas en los partidos de hoy. Por eso, el equipo de Nicola Brienza, capitaneado en la pista por James Blackmon y Alesandro Gentile, supo jugar sus bazas y acabó superando al Unicaja mucho más pendiente ya de qué rivales le tocarán en la siguiente fase (el MoraBanc andorra ya es seguro) e incluso del Casademont Zaragoza, que será el rival que visite el sábado el Martín Carpena en jornada liguera.

Casimiro lo tuvo claro desde el primer cuarto. El canterano Morgan Stilma apareció muy pronto en el partido como escudero de Carlos Suárez en el puesto de «4» (Deon Thompson fue baja por unas molestias en el pie derecho). También Guerrero tuvo sus minutos. Y Brizuela, necesitado de coger sensaciones en una competición que no conoce y en la que todos esperamos que sea un jugador importante a partir de la próxima fase, también fue de los más utilizados.

El partido estuvo igualado, con intercambio de canastas hasta mediado el segundo cuarto. Pero del 26-32 se pasó a un 38-32, tras un 12-0 de parcial, que permitió a los italianos dominar el marcador al descanso con cierta holgura, 45-37.

En el tercer cuarto los locales siguieron aumentando la renta. Se fueron de 16, 67-51 gracias a los buenos minutos de Gentile, su jugador franquicia. El Unicaja se acercó a 4 en el último cuarto en una cuenta atrás de minutos para certificar oficialmente que el Dolomiti Trento es uno de los 16 mejores equipos de la Eurocup y que el Unicaja es el merecido campeón de este grupo D de la primera fase.