La plaga de lesiones que vive el Unicaja no tiene parangón. Medio equipo cajista es baja por algún motivo. Una escabechina que deja a los verdes en una situación muy precaria de cara al choque liguero de este domingo por la tarde frente al Real Madrid, en el Martín Carpena, desde las 18.15 horas.

Deon Thompson ha recibido el alta este viernes del virus gástrico que le ha tenido fuera del equipo los últimos días, pero son bajas seguras Axel Toupane, Carlos Suárez, Melvin Ejim y los dos bases del equipo: Alberto Díaz y Jaime Fernández.

En esta situación, Luis Casimiro se verá obligado a hacer auténticos juegos malabares para tratar de oponer resistencia y competir ante el actual campeón de la Copa del Rey y uno de los equipos más en forma de toda Europa, como está demostrando este Real Madrid que ha llegado en su momento más top al siempre importante mes de febrero.

Los fichajes esta misma semana de Axel Bouteille y de Marko Simonovic significan una bocanada de aire fresco para las rotaciones de Casimiro, pero ninguno de los dos sirve para ayudar en el mayor problema que tiene el equipo: la falta de un director de juego ante las ausencias de Alberto y Jaime.

Sin un base puro, Josh Adams ejercerá de "1" otra vez. El americano llegó el pasado verano al Unicaja para compartir con Alberto la posición de base. El paso de los partidos hizo ver a Casimiro que Adams era más aprovechable jugando de escolta que de director de orquesta, por lo que desde hace aproximadamente dos meses sus minutos en la posición de base han sido testimoniales, dejando esa responsabilidad al citado Alberto Díaz y a Jaime Fernández, con el que permutó Adams entonces su posición en la pizarra del técnico cajista.

A lo largo de esta semana de entrenamientos, tras el regreso de los internacionales de la "Ventana FIBA" y de la llegada de los dos nuevos refuerzos, Bouteille y Simonovic, Luis Casimiro ha apostado por Darío Brizuela como el otro "base de emergencia" para esta cita liguera frente al Real Madrid.

Brizuela deberá este domingo variar su rol habitual o, mejor dicho, compaginar las posiciones de "1" y de "2" ante los graves problemas de recursos humanos que tiene el Unicaja en estos días.

La tercera opción con la que contará Casimiro es un joven de la cantera cajista que podría debutar con el primer equipo verde con solo 16 años recién cumplidos el pasado 11 de diciembre. Se trata de Rafa Santos, un base cordobés llegado a la "fábrica" de Los Guindos el pasado verano procedente de Cordobasket, que empezó la temporada jugando en el Unicaja 03 de Jesús Lázaro, que las lesiones de José García y de Pablo Sánchez (bases del equipo de Liga EBA) le han hecho "subir" al Unicaja 02 de Antonio Herrera y que ahora, con los problemas físicos del primer equipo, le han llevado a entrenarse con los "mayores" por esta última plaga de lesiones.

Salvo cambio de planes, la idea es que Santos se vista este domingo por primera vez con el Unicaja e incluso podría tener la ocasión de debutar. Santos es un jugador con mucho desparpajo, buena visión de juego, buen pasador, muy hábil para robar balones e intenso en defensa. Su trabajo en los entrenamientos del primer equipo ha convencido a los técnicos y está ante su gran oportunidad en esta cita liguera frente al equipo blanco.

Está claro que el Unicaja jugará este domingo uno de los partidos más difíciles de los últimos tiempos. Frente al todopoderoso Real Madrid, con media plantilla lesionada, con jugadores fuera de su posición habitual y con un canterano de 16 años como ayuda extra. Pero es lo que hay.