El Unicaja cuenta con Francis Alonso. Eso es lo que dice cualquier interlocutor del club verde cuando se le pregunta al respecto. El propio presidente, Eduardo García, el pasado viernes, en la rueda de prensa de presentación de la renovación del contrato de Luis Casimiro, fue tajante cuando se le preguntó sobre este asunto. "Ya hemos demostrado que contamos con Francis. Nada más llegar del coronavirus vino a entrenar con el equipo y hubiese ido a Valencia si no fuera por las circunstancias. Es de la casa, de la plantilla, está en el 'roster'. Lo sabe más que de sobra que apostamos por él, necesita su tiempo. Es patrimonio del club, del patrimonio se habla bien", aseguró.

Las declaraciones del presi llegaban solo un par de días después de conocerse que el Zielona Gora polaco que entrena Zan Tabak había pedido la cesión del malagueño para la próxima temporada, una solicitud que el club ha descartado... al menos por ahora.

Sin embargo, paralelamente a esa presunta apuesta por Francis para que sea uno más de la primera plantilla cajista el próximo curso, lo cierto es que el club ha salido al mercado a buscar un jugador de perímetro, de sus mismas características, que llegue a Málaga como temporero los primeros meses de competición. Es una decisión que se debatió en el consejo de administración de la semana pasada y que ha provocado que en los últimos días hayan llegado varios ofrecimientos a los despachos de Los Guindos.

La prensa catalana ha vinculado en las últimas horas al veterano Rafa Martínez, ex de RetaBet Bilbao Basket esta última campaña, con el equipo cajista precisamente para ocupar este puesto. Un jugador veterano que ya se ha comprometido con el Baxi Manresa, pero que de haber venido a Málaga habría acaparado muchos minutos que la lógica dice que deberían estar destinados al exuniversitario de Greensboro.

Todas estas dudas vienen provocadas porque en Los Guindos no tienen claro cuándo estará disponible a su máximo nivel Jaime Fernández, operado hace algunas semanas de sus dos talones. Es probable que hasta noviembre no vuelva el madrileño a las pistas y por eso, el club no cierra la puerta a fichar a un temporero en su lugar. Surgen dos preguntas de forma inmediata ante semejante decisión. ¿No hay confianza en la pareja Brizuela-Alonso mientras vuelve Jaime Fernández? ¿Se cuenta con Francis solo como el jugador número 13 de la plantilla, sí para entrenar, pero no para competir?

Pues visto lo visto, parece que sí. El Unicaja no quiere que Francis salga cedido al campeón de Polonia y juegue competición continental, pero tampoco se le quieren dar galones para comenzar a crecer como jugador vestido con la camiseta verde. No se puede negar que la "apuesta" del Unicaja por Francis Alonso es, cuanto menos, "extraña".