Casi siete meses después, desde el choque liguero ante el Real Madrid del pasado 1 de marzo el público volvió este martes al Martín Carpena. Fue un grupo reducido de poco más de 225 abonados, los más rápidos en comprar el pasado viernes y sábado las 225 entradas que el club puso a la venta a través de su página web para el debut del Unicaja en la Eurocup 2020/2021.

Ubicados en la zona de Tribuna, milimétricamente repartidos para asegurar el distanciamiento social y pertrechados cada uno con su correspondiente mascarilla, la afición cajista pudo volvcer al templo verde para ver a su equipo en directo.

El protocolo de la Junta de Andalucía permite un máximo de 400 espectadores en el recinto cajista. Entre espectadores, prensa, trabajadores del club y los propios protagonistas del partido se llegó a esa cifra, ínfima para lo que era un partido normal del equipo antes de la pandemia, pero al menos un paso al frente para que todo vuelva a la normalidad en el futuro.