Los astros se han alineado para que Gal Mekel consiga volver a brillar con la equipación del Unicaja. Si el 6 de octubre disputó su último encuentro hasta la fecha a las órdenes de Luis Casimiro, ahora, justo dos meses después, concluirá esta racha negativa para reencontrarse con el parqué del Martín Carpena, mañana mismo, en el partido ante el UCAM Murcia (17:00 horas). En este encuentro el base israelí está llamado a reivindicarse, a recuperar sensaciones y dejar huella con el Unicaja, como ya hizo en los últimos encuentros con la selección de Israel, el pasado fin de semana.
Han sido nada más y nada menos que trece partidos los que Mekel se ha perdido desde octubre, cuando se lesionó en el aductor de su pierna izquierda. Una frenada en seco después de las buenas actuaciones que había dejado en los primeros encuentros de la temporada. El israelí, en seis partidos, llevaba unos números más que aceptables de 8.5 puntos y 5 asistencias por partido. Una vez superado el periodo de recuperación inicios del mes de noviembre comenzó a entrenar con normalidad junto a sus compañeros. Estaba ya disponible justo antes del parón de selecciones, tenía el alta de los servicios médicos del club e incluso fue parte de la expedición que viajó a Madrid para afrontar el choque liguero ante el Movistar Estudiantes. Pero el cuerpo técnico cajista prefirió prevenir a curar y lo descartó a última hora.
De esta manera, Mekel no volvió a disputar un partido oficial hasta la semana pasada, cuando su combinado nacional lo convocó para esta última Ventana FIBA. El destino quiso que regresase en Valencia y ante España para dejar claro que está de vuelta y que, siempre que la salud se lo permita, aspira a ser un base de garantías para Luis Casimiro.
Sus acciones fueron determinantes para que Israel cosechase estas dos importantes victorias. Actuaciones y estadísticas que invitan al optimismo en clave cajista al sumar18 puntos, 4 rebotes, 5 asistencias y 23 de valoración en los 24:45 minutos que disputó ante los de Scariolo, además de los 12 puntos que anotó ante Polonia y la seguridad que transmitió a lo largo de los 24:36 minutos que estuvo en la cancha.
Gal Mekel llegó el pasado mes de marzo a la entidad de Los Guindos como apoyo clave a la dirección de juego del equipo de Luis Casimiro, que necesitaba otra pieza para subir un peldaño de calidad y además tener otro recambio fiable para las rotaciones. Ahora tendrá una nueva oportunidad para volver al ritmo de competición que logró a inicios de campaña, sobre todo porque la situación del equipo ha cambiado, concretamente en su posición.
Además de su recuperación física y el buen hacer con la selección israelí, en estos momentos Gal Mekel se alza como el único base puro con el que puede contar el entrenador del Unicaja de cara al envite de mañana por la tarde ante el UCAM Murcia.
Jaime Fernández empieza a ver la luz al final del túnel tras la rotura muscular que sufrió en el aductor derecho por un pinchazo que sintió durante el partido contra el Estudiantes. Por eso no entró en la última convocatoria de la selección, tanto el Unicaja como en el combinado nacional apuestan por una recuperación plena para evitar males mayores en el futuro.
En cambio, ahora la peor parte que la lleva el malagueño Alberto Díaz, justo al regresar al trabajo con el equipo cajista tras el periplo con la selección. Hace tan solo un par de días, el Unicaja confirmaba que el base criado en la cantera de Los Guindos padecía molestias en los isquiotibiales de su pierna izquierda y que, por lo tanto, sería baja para esta jornada de liga ACB ante el conjunto murciano.
Con este panorama, Gal Mekel tiene una nueva oportunidad de volver a vencer y convencer. Su suerte será la suerte del Unicaja.
