Frankie Ferrari ya está en la Costa del Sol. Aterrizó poco antes de las 22 horas en el aeródromo malagueño para firmar con el Unicaja un contrato de dos meses. Se convertirá así en flamante temporero para una plantilla que aún lamenta la baja de Gal Mekel.
El base estadounidense militó la pasada campaña en el Baxi Manresa, pero ha permanecido en el Herbalife Gran Canaria hasta este pasado jueves. Una docena de encuentros en Liga Endesa y otros nueve en Eurocup, en los que ha promediado entre seis y ocho puntos por partido, conforman su aval más reciente.
El técnico Luis Casimiro podrá disponer de Ferrari a partir del próximo encuentro liguero frente al Fuenlabrada, ya que este miércoles no puede jugar en Eurocup frente al Ratiopharm Ulm por haber disputado esta primera fase con el Herbalife. Será el encargado de suplir a un Mekel que este mismo sábado fue intervenido quirúrgicamente de la fractura en el dedo que le mantendrá fuera de las canchas como mínimo durante ocho semanas.
El conjunto cajista ha acumulado hasta tres bajas en la dirección del juego. Al regreso de Jaime Fernández durante estos días, después de sus dolencias, le siguió la baja del malagueño Alberto Díaz. Este último estará fuera de concurso al menos mes y medio más. Y el nuevo contratiempo lo ha representado el propio Mekel. Así ha tenido que recurrir al mercado de manera urgente y pescar en tierras insulares.
Ferrari es bien conocido en las oficinas de Los Guindos. Se le ha seguido de cerca por las prestaciones que atesora con apenas 24 años de edad. El californiano de pasaporte italiano roza el 1.85 de estatura y conoce de sobra la Liga Endesa. Su hasta ahora equipo lo despedía, apenas 24 horas antes de su llegada a Málaga, a través de un escueto comunicado: «El Herbalife Gran Canaria y Frankie Ferrari han llegado a un mutuo acuerdo para la rescisión de contrato que les unía. El club claretiano quiere agradecer al jugador los servicios prestados y le desea la mayor de las suertes en su futuro profesional».
Lo cierto es que se esperaba mucho de él cuando aterrizó este mismo verano en Gran Canaria. En Manresa había promediado 16 puntos y cinco asistencias en seis encuentros, pero precisamente le había impedido una lesión poder prolongar esas estadísticas. Su contribución en su nuevo destino ha estado por debajo de lo que se esperaba, relegado a un segundo plano con el paso de los meses.
Pero en las oficinas de Los Guindos se es consciente del potencial que aún atesora. Sobre la mesa había opciones para intentar captar la atención de nombres propios como los de Quino Colom, Tylor Rochestie o Leo Westermann. Sin embargo, la oferta temporal sólo fue aceptada por un Ferrari que vivirá su tercera experiencia en Liga ACB con la intención de crecer como jugador y aspirar a nuevas metas.
Hoy mismo se incorpora a los entrenamientos y podrá debutar ante el Fuenlabrada el martes, 22 de diciembre.
