Liga Endesa/Jornada 27

El Unicaja, sin opciones en Valencia

Derrota 90-75 de los verdes ante un Valencia Basket superior, que corta la racha de tres triunfos seguidos de los cajistas en la Liga Endesa

Emilio Fernández

Emilio Fernández

Al más puro estilo Will Smith en la noche de los Oscar, el Unicaja recibió en La Fonteta una bofetada de realidad. Los verdes perdieron 90-75 con el Valencia Basket, tras 40 minutos en los que quedó claro que el Unicaja está mejor, mucho mejor, que hace algunas semanas, pero no le da todavía para grandes retos. El equipo puede competirle ahora a casi cualquiera, pero le falta un plus para poder ganar a los mejores. Ese "extra" que te hace ser candidato a retos más exigentes que ganar a los de abajo o simplemente escapar de la zona "caliente" de la clasificación.

En La Fonteta se encontró a un rival de la zona alta, que supo ir desgastando al equipo verde y que tiró de "fondo de armario" para quedarse con la victoria sin mucho sufrimiento. No vimos seguramente este domingo al mejor Valencia Basket de la temporada, pero les bastó a los de Joan Peñarroya con lo que pusieron sobre el parqué para tener una tarde plácida.

Las tres victorias seguidas en Liga hacían soñar con un nuevo triunfo que habría puesto a los malagueños muy cerca de la zona noble de la Liga, pero no hubo ni opción. El Unicaja fue mejor en los primeros 10 minutos, pero a partir de ahí lo mejor que hizo fue aguantar hasta el inicio del último cuarto "enganchado" en el marcador. Sobre todo fue desalentador el tramo final del partido, en el que estuvo a merced de su rival, que llegó a estar 19 arriba, 90-71.

Es muy difícil ganar en Valencia. Tienes que hacer un partido casi perfecto. Y a veces, ni con eso te vale. Esta vez, con medio equipo por debajo de su nivel, bastante hizo el Unicaja con estar 30 y pico minutos cerca de su rival. Mooney no tuvo su día ni en la dirección ni en defensa, Cameron Oliver rehuyó el cuerpo a cuerpo y se empeñó en tirar de fuera. Van ya varios partidos, por cierto, que el americano pisa la pintura solo por casualidad. Sinceramente, no creo que sea esa la función para la que se le fichó ni tampoco el hábitat en el que el Unicaja le puede sacar más partido. Tampoco tuvo un buen día Francis Alonso, que suele necesitar muy poquito para sumar, pero que esta vez en 10 minutos es que ni lanzó a canasta. Bouteille tampoco apareció hasta que el partido estaba finiquitado. En fin, que así es imposible.

Y eso que jugó bien el Unicaja en el primer cuarto. Mandó en el marcador desde el inicio dando una imagen muy sólida atrás y muy certera en ataque. Se fueron los verdes 7 arriba en un abrir y cerrar de ojos, 6-13, y si no es por un par de triples de Víctor Claver la diferencia podría haber sido mayor de +6 con que acabó el primer cuarto, 19-25.

No tuvo continuidad el equipo verde en el segundo parcial. El Valencia arrancó con un 8-0 que dio la vuelta al marcador, 27-25. No encontró Ibon Navarro en Mooney y Cameron Oliver dos buenos recambios en su banquillo. Los dos americanos estuvieron fríos sobre el parqué de La Fonteta y el rival lo aprovechó. El Valencia se fue de 4, 39-35, pero el Unicaja ajustó su defensa, acertó en un par de ataques seguidos y volvió a ponerse por delante, 39-40, dentro ya de los dos últimos minutos del primer tiempo. El partido alcanzó el descanso con 41-40 y todo por decidir. Bastante buena imagen de los verdes en esos primeros 20 minutos en la cancha de uno de los "grandes" de la Liga.

El Unicaja perdió en su visita a Valencia.

El Unicaja perdió en su visita a Valencia. / ACBPhoto

Volvió el Unicaja muy despistado del intermedio. Otra vez con Mooney en la dirección, el Unicaja estuvo espeso, sin ideas y a merced de un Valencia que cuando pudo correr hizo daño y si no encontró un filón debajo del aro con un muy activo Jasiel Rivero, 50-43. Un triple de López Arostegui obligó a Ibon Navarro a pedir tiempo en el peor momento del Unicaja en el partido, con 58-49, dentro de los 4 últimos minutos del tercer cuarto. El intercambio de canastas de los siguientes ataques no le valió al Unicaja nada más que para entrar en los 10 minutos finales con un ya amenazante 65-58 para los taronja.

Navarro le dio una vuelta de tuerca a su pizarra: Abromaitis de alero y Bouteille de escolta, con Oliver y Kravic por dentro, y Albertito en la dirección. Despùés apostó por Brizuela de "1", pero ningún recurso fue eficaz para meter miedo a un Valencia que mediado el último cuarto estaba 10 arriba, 76-66. El rival, además, tuvo la suerte de cara en un par de triples lanzados sobre la bocina que encontraron el premio de la canasta y que acabaron por romper el partido, 82-70. Al final, después de un +19 para los de casa, 90-75... y poquito que objetar.

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