Sima, Fitipaldo, Webb y Wimbush: Los «otros» fichajes que no llegaron

Juanma Rodríguez e Ibon Navarro ya tienen a sus 12 jugadores de la plantilla verde 2022/2023, contando al norteamericano Tyson Carter, que todavía no ha sido confirmado por el club de Los Guindos.

El Unicaja ha completado su anunciada revolución antes de comenzar la pretemporada. Solo se han salvado tres jugadores de la quema de la inaguantable campaña pasada: Alberto Díaz, Darío Brizuela y Jonathan Barreiro. Tres de los cuatro cajistas que tenían contrato, junto a Yannick Nzosa, que saldrá en las próximas semanas cedido destino a otro club de la Liga Endesa, tras no concretar su salto a la NBA, que queda pospuesto para más adelante.

El Martín Carpena se encontrará este próximo curso con nueve incorporaciones. Serán todos los que están, pero no estarán todos los que podrían haber sido. Y es que a lo largo de las últimas semanas se negoció con otros muchos jugadores que por unos u otros motivos han acabado eligiendo otros destinos en lugar del club costasoleño.

Uno de esos que estuvo desde muy pronto en la agenda del Unicaja fue Yankuba Sima, que definitivamente jugará en el Reyer Venezia italiano esta próxima temporada. Hubo contactos con su entorno, se valoró la opción de apostar por él, pero entre que sus derechos pertenecían al Baxi Manresa, con quien había que negociar, y que se prefería apostar por un jugador más veterano en esa posición, el propio Unicaja decidió quitarse de la puja por el pívot internacional español hasta ahora en las filas del Baxi Manresa. En las oficinas de Los Guindos seguirán, no obstante muy atentos a su evolución porque es un jugador que en el futuro sí podría interesar. ¿Será una posibilidad para el próximo verano? Veremos...

Otro nombre muy presente en la agenda estival cajista ha sido James Webb III. El ala-pívot fue fundamental en el gran año que tuvo en Liga Endesa y en Copa del Rey el UCAM Murcia. El propio Augusto Lima animó al club a que ficharan al ‘4’ en una entrevista a La Opinión de Málaga. Realmente fue una gran opción durante muchas semanas. Sin embargo, el poderoso Valencia Basket, un equipo que jugará esta próxima campaña la Euroliga y que tiene un presupuesto muy superior al del cuadro cajista, se cruzó por el camino y pelear contra ellos fue desde el principio una utopía, por lo que se descartó esa «guerra» y se buscaron otras opciones.

Bruno Fitipaldo fue otro de los candidatos para recalar en el Unicaja 22/23 de Ibon Navarro. Su perfil era muy necesario como director de juego natural. No obstante, en Los Guindos se encontraron con un gran obstáculo a la hora de apostar por su llegada: el uruguayo tiene un año más de contrato con el Lenovo Tenerife.

¿Fue un objeto de deseo para el Unicaja? Sí. ¿Hubo alguna opción real de traerlo? No. Fue imposible llegar a ningún acuerdo porque no tiene cláusula de salida del cuadro chicharrero. Se habló y se escribió mucho de él, pero desde el primer momento se sabía en Los Guindos que era una operación imposible por cuestiones puramente contractuales.

El caso de Thomas Wimbush es más «especial». El ala-pívot estuvo muy cerca hace solo unos días de aterrizar en Málaga para vestir la camiseta del Unicaja la próxima temporada. Su perfil era clave en la confección de la plantilla, ese jugador capaz de jugar de alero y de ala-pívot. Club y jugador estuvieron en negociaciones muy avanzadas, con cifras encima de la mesa. Sin embargo, el Zenit de San Petersburgo, a pesar de que no jugará competición europea el curso 2022/2023, le ofreció más de el doble del salario que le había propuesto la dirección deportiva cajista, además con dos años garantizados. Imposible pelear contra los rublos rusos. Su no fichaje desembocó solo unas horas después en la llegada de Melvin Ejim, que regresa a Málaga dos temporadas después de su salida en el verano de 2020.

Estos cuatro nombres han sido muy importantes en el verano cajista, pero no fueron los únicos nombres que se vincularon en mayor o menor medida al próximo proyecto cajista. El «no» fichaje del que más se ha hablado ha sido, de largo, del de Jayson Granger. El base uruguayo rescindió contrato con el Baskonia nada más terminar la temporada, equipo en el que había disputado la última temporada. El deseo del jugador era volver a Málaga, pero su deseo se topó con otras ideas por parte de la dirección deportiva verde, que prefirió apostar por otras opciones antes que por su regreso. Ahora jugará en Italia, en el Umana Reyer Venezia junto a Marco Spissu y Yankuba Sima.

¿Ángel Delgado? Pues a pesar de todo lo escrito y de todo lo apuntado en esa dirección, lo cierto es que el Unicaja nunca tuvo sobre su mesa el nombre del pívot dominicano como una opción de futuro. Ni hubo contactos con él ni su entorno y menos aún cualquier tipo de oferta.

Todos estos nombres, y otros muchos que se quedarán para siempre en el secreto del email y el teléfono de la dirección deportiva, no vestirán la camiseta cajista la próxima temporada. La plantilla verde 2022/2023 ya está cerrada. Y tiene buena pinta.

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