Europeo sub-16

Saint-Supéry lleva a España a la final del Europeo sub-16

Los 21 puntos, 6 asistencias, 3 rebotes, 5 robos y 19 de valoración del canterano del Unicaja fueron esenciales para superar a Francia (64-78), y peleará por el oro frente a Lituania

Mario Saint-Supéry, canterano del Unicaja, jugará la final del Europeo sub-16

Mario Saint-Supéry, canterano del Unicaja, jugará la final del Europeo sub-16 / FIBA

Beatriz Tocón

Beatriz Tocón

No es novedad que alguna de las categorías inferiores de España vaya a jugar la final de un torneo continental. Tampoco es novedad que una de las grandes estrellas de la competición sea española. Sin embargo, sí que es especial que lo sea un canterano del Unicaja. Mario Saint-Supéry jugará por el oro en el Europeo sub-16. Sus 21 puntos, 6 asistencias, 3 rebotes, 5 robos y 19 de valoración llevaron al equipo nacional a la victoria contra Francia (64-78) para pelear por el trofeo este sábado ante Lituania.

El entrenador francés ya sabía a lo que se iba a enfrentar desde el principio. Nicolas Cyril trató de frenar al malagueño con la defensa un jugador de 2.04 metros. Sin embargo, poco le importó al canterano cajista. Suyo fue el 0-4, el 2-8, el 7-11... suyos fueron el primer rebote y la primera asistencia del partido. Saint-Supéry estaba jugando la semifinal de un Europeo y se sentía como en el patio del colegio. Mucha responsabilidad tuvo en el 12-16 con el que se llegó al fin del primer cuarto después de que ambos equipos empezaran muy dubitativos por los nervios. 

Descansó un par de minutos y volvió. Ni siquiera necesitó mucho tiempo de espera para volver a brillar. En su primera acción hizo un reverso hacia canasta que acabó con un 2+1 y una jugada espectacular. Pero su radio de acción no se limitaba al ataque. En apenas 20 segundos robó dos balones y con un mate situó el marcador en 19-30. Ángel González, el técnico español, le dio un respiro con un 24-31, aunque su descanso duró hasta que los franceses apretaron con un 28-33. Y respondió para que España aumentase de nuevo la ventaja. 

El rinconero retomó el ritmo del partido tal y como había terminado. Asistencia, triple, robo... estaba siendo imperceptible tanto en ataque como en defensa. Mantuvo a raya a Francia. El equipo siguió ganando, pero despegarse de los galos no iba a ser tarea fácil. Los hispanos llegaron al término del tercer cuarto con un 49-61 a favor. Los últimos instantes habían sido muy importantes y Saint-Supéry estaba liderando a la selección con esos 18 puntos, 4 asistencias y 5 robos que registraba hasta el momento.

Francia iba a apurar cada posesión para agarrarse al partido. A falta de siete minutos, el marcador era de 52-66 y España trabajó para llevarse una semifinal en la nunca estuvo por debajo en el marcador. Sin embargo, la gran actuación del malagueño no iba a quedar ahí. Controlando la euforia por llegar a la final, habló con sus compañeros para dejar la celebración una vez los franceses hubiesen salido de la cancha como símbolo de respeto.

La final será este sábado a las 21.00 horas contra Lituania. No obstante, ahí no se decidirá solo el oro. Mario Saint-Supéry peleará por entrar en el quinteto ideal del torneo y quién sabe si por hacerse con el MVP de la competición.

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