Pretemporada

85-82: Un Unicaja sin ritmo cae en Lisboa en su primer test de pretemporada

Los de Ibon Navarro pierden frente al Sporting de Portugal, con una evidente falta de rodaje en un proyecto con muchas piezas que encajar

David Kravish, en el amistoso del Unicaja frente al Sporting de Portugal.

David Kravish, en el amistoso del Unicaja frente al Sporting de Portugal. / Sporting CP

Beatriz Tocón

Beatriz Tocón

El Unicaja arrancó la pretemporada con una derrota en el II Torneo Internacional de Lisboa frente al Sporting de Portugal (85-82). De menos a más, con mucha irregularidad y con más "chispazos" individuales que juego colectivo -síntomas evidentes de inicio de preparación- los de Ibon Navarro se vieron superados por los locales en este primer amistoso que evidenció las debilidades y algunos indicios de fortalezas.

Nadie esperaba la mejor versión del Unicaja en el primer partido de pretemporada porque el encuentro demostró eso, que era pretemporada. ¿Quizás en exceso? A lo mejor, pero lo que es evidente es que este equipo, aún más sin Alberto Díaz y sin Darío Brizuela, es completamente nuevo y necesita mucho rodaje. Mucho. Con nueve incorporaciones, seis de ellas en Portugal, hay infinidad de trabajo por hacer.

Lo que sí es cierto es que Ibon Navarro, con las rotaciones, demostró la versatilidad que va a tener el Unicaja en cuanto a posiciones. El técnico vitoriano lo probó todo con mejor o peor resultado: Dylan Osetkowski en el '4' y en el '5', Nihad Djedovic como director de juego y en defensa como '3', Tyler Kalinoski en el '2' y en el '3'... De todo. 

El partido no pasará a la historia por lo visto en la pista. Es más, fue el perfecto ejemplo de lo que significa la pretemporada: coger ritmo. El equipo estuvo falto de piernas y lo evidenció en los 10 primeros minutos. El líder en ataque fue Jonathan Barreiro con 9 puntos, mientras que líder atrás... no hubo, estaba en Georgia. Los portugueses parecían estar más rodados.

Del 29-25 del primer cuarto se pasó en cinco minutos al 34-35. Aprovechando los fallos de los portugueses en el tiro, los cajistas hicieron un baloncesto sencillo: rebote, transición y canasta. Pero la felicidad en el banquillo visitante duró escasos segundos. Navarro tuvo que frenar el partido después de encajar un parcial de 6-0 (40-35) para reconducir la situación. A partir de ahí, los jugadores empezaron a sentirse algo más cómodos sobre la pista dándole más velocidad al juego en ataque. Los portugueses bajaron varias marchas y los malagueños, con más individualismo que fluidez, confirmaron la ventaja para llegar al descanso: 44-48.

En el regreso a la pista, la imagen fue otra. O eso intentaron. Había más manos en defensa, más ayudas y más intentos por capturar algún rebote. Aunque el Sporting de Portugal volvió a dar un paso hacia delante con más intensidad (54-48) en todas las parcelas. Algún destello de Tyson Carter y algún 2 contra 1 que acabó en robo volvieron a enganchar al Unicaja después de ir perdiendo por 57 a 50. A falta de 1:30 para el último período, un triple de Tyler Kalinoski puso al equipo cajista otra vez por delante (57-60). 

Como ocurrió en cada reanudación, los locales apretaron generando cierta ventaja sobre el Unicaja y, durante cinco minutos, el único que anotó en ataque fue Tyson Carter. El equipo pareció despertar (75-76), pero el partido acabó cayendo del lado local (85-82).

Tras la derrota, el Unicaja jugará por el tercer y cuarto puesto este domingo a partir de las 16.30 horas frente al Coosur Real Betis de Luis Casimiro, quien también perdió ante el Benfica (73-67). Los sevillanos contarán con la baja casi segura de Yannick Nzosa, jugador cedido por el club de Los Guindos, por unas molestias físicas.

Del primer día no se sacan conclusiones en firme. Del segundo tampoco. La realidad ha cambiado esta temporada y el único objetivo es que los jugadores se vayan conociendo en la pista para ir mejorando en las sensaciones. Queda mucho camino que recorrer. Lo verdaderamente importante llegará el 23 de septiembre. 

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