Científicos chinos descubren que una planta tradicional ha evolucionado para hacerse menos visible a los humanos allí donde más se recolecta

La presión que sufren los vegetales por parte de los humanos les induce a ir adoptando medidas para hacer frente a esta amenaza. Así se ha comprobado en el caso de una planta utilizada en la medicina tradicional china, que ha evolucionado para volverse menos visible para los humanos y, de algún modo conseguir 'esconderse' de ellos, según un estudio que acaba de publicarse en Current Biology.

Las plantas de Fritillaria delavayi, que viven en las laderas rocosas de las montañas Hengduan de China, terminan mimentizándose más con su entorno en aquellas áreas donde sus ejemplares se recolectan con gran intensidad, según las conclusiones de la investigación.

Evolución hacia nuevos colores

Este hecho sugiere que los humanos están impulsando la evolución de esta especie hacia nuevas formas de color porque las plantas mejor camufladas tienen una mayor probabilidad de supervivencia.

El estudio fue realizado por el Instituto de Botánica de Kunming (Academia de Ciencias de China) y la Universidad de Exeter. Ha sido dado a conocer en un artículo, publicado en la revista Current Biology, que se titula: «La cosecha comercial ha impulsado la evolución del camuflaje en una planta alpina».

«Es notable ver cómo los humanos pueden tener un impacto tan directo y dramático en la coloración de los organismos silvestres, no solo en su supervivencia sino en su propia evolución», dijo el profesor Martin Stevens, del Centro de Ecología y Conservación en el campus Penryn de Exeter, informa Eureka Alert.

Adaptarse a los herbívoros... y a las personas

«Muchas plantas parecen usar el camuflaje para esconderse de los herbívoros que pueden comerlas, pero aquí vemos que el camuflaje evoluciona en respuesta a los recolectores humanos.

«Es posible que los humanos hayan impulsado la evolución de estrategias defensivas en otras especies de plantas, pero sorprendentemente aún hay pocas investigaciones al respecto».

En el estudio, los investigadores midieron en qué grado estas plantas eran fáciles de recolectar y hablaron con los habitantes de la zona para estimar cuánta recolección se llevó a cabo en cada lugar. De este modo, descubrieron que el nivel de camuflaje en las plantas estaba correlacionado con los niveles de cosecha.

En un experimento por computadora se observó que las plantas más camufladas también tardaron más en ser detectadas por las personas.

Fritillaria delavayi es una hierba perenne que tiene hojas, que varían en color de gris a marrón a verde, a una edad temprana y produce una sola flor por año después del quinto año. El bulbo de la especie fritillary se ha utilizado en la medicina china durante más de 2.000 años, y los altos precios de los últimos años han llevado a un aumento de la recolección.

«Como otras plantas camufladas que hemos estudiado, pensamos que la evolución del camuflaje de esta fritillary había sido impulsada por herbívoros, pero no encontramos tales animales», dijo el doctor Yang Niu, del Instituto de Botánica de Kunming. «Entonces nos dimos cuenta de que los humanos podrían ser la razón».

El profesor Hang Sun, del Instituto de Botánica de Kunming, agregó: «La recolección comercial es una presión de selección mucho más fuerte que otras muchas presiones que hay en la naturaleza». El estado actual de la biodiversidad en la tierra está determinado tanto por la naturaleza como por nosotros mismos «.