Este es el truco de una estrella Michelín para convertir el tomate frito de supermercado en un plato gourmet

Con esta recomendación de Ferran Adrià un simple tomate frito de supermercado gana una 'estrella Michelín'

Este es el truco de una estrella Michelín para convertir el tomate frito de supermercado en un plato gourmet

Este es el truco de una estrella Michelín para convertir el tomate frito de supermercado en un plato gourmet

Con la reciente celebración de la gala de la Guía Michelin y los nuevos restaurantes estrenando su prestigiosa distinción en toda España, la excelencia gastronómica nacional vuelve a estar en boca de toda la población.

Este evento, que reconoce los mejores restaurantes, también inspira a quienes disfrutan de cocinar en casa y buscan formas creativas de rendir homenaje a la alta cocina desde sus propias recetas.

En este sentido, fijarse en los trucos de los chefs más reconocidos, como Ferran Adrià, es una gran idea para elevar la calidad de los platos cotidianos con gestos sencillos.

Trascendiendo lo culinario, Ferran Adrià se ha convertido en una figura icónica de la gastronomía mundial y uno de los chefs más influyentes de las últimas décadas.

Durante su etapa al frente del mítico restaurante El Bulli, en la Costa Brava, revolucionó la cocina contemporánea con su creatividad desbordante y técnicas pioneras y ganó hasta tres estrellas Michelin que marcaron un antes y un después en la historia de la alta cocina.

Aunque su nombre se suele asociar a una alta la complejidad técnica propia de la cocina e vanguardia, Adrià también ha demostrado poder aterrizar su talento único para convertir recetas sencillas en auténticas joyas gastronómicas. Prueba de ello es el truco que compartió en su serie 'La cocina fácil de Ferran Adrià', donde explica cómo transformar el tomate frito de supermercado en una salsa digna de un restaurante con estrella Michelin.

El truco de Ferran Adrià para sacralizar el tomate frito de supermercado

El secreto de Adrià reside en potenciar la cremosidad y el sabor del tomate frito con ingredientes simples que cualquiera puede tener en casa.

Según su idea, la clave está en añadir un poco de nata para cocinar: un ingrediente que aporta una textura más rica y suave; y en acompañar la mezcla de una generosa cantidad de pimienta para darle energía y carácter.

Para realzar aún más los sabores, el chef también recomienda incorporar orégano fresco y un buen chorro de aceite de oliva virgen extra.

El proceso es sencillo y rápido: hay que calentar el tomate frito en una sartén a fuego muy bajo, añadir la nata y remover para integrar bien ambos ingredientes. Luego se le añaden la pimienta y orégano fresco, ajustando la cantidad según el gusto, y se completa con el aceite de oliva.

Una vez mezclados todos los elementos, se deja que la salsa hierva a fuego lento durante unos minutos para que los sabores se fundan por completo. El resultado es una salsa completamente transformada, perfecta para acompañar pasta o enriquecer cualquier otra receta.

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