Muchos son aquellos que han colgado un mapa a la pared y allí van colocando alfileres marcando los destinos que algún día querrán visitar, o en los que ya han estado. Por eso, queremos reivindicar el uso de la geografía como elemento decorativo, ya que los mapas, sus colores, sus tamaños pueden rellenar cualquier espacio de un modo muy especial y significativo.

Desde colgar un mapa mundi a la pared, ya sea con un fino corcho para darle consistencia o enmarcándolo a modo de cuadro, a mueble bares en forma de bola del mundo, lámparas o moquetas con alguna parte del globo terráqueo.

Algunas webs ofrecen la posibilidad de crear un vinilo con el mapa que uno desee, sujetos al tamaño y a la forma que se prefiera. También se puede optar por una bonita vista de pájaro de cualquier rincón idílico, de la propia ciudad o incluso de la propia vivienda.

Mural en azul, de http://pinterest.com/

Para aquellos que han optado por un entorno rústico, la opción cartográfica más coherente puede ser un adhesivo de un antiguo mapa, con colores cálidos, marrón y amarillo, que refuercen la imagen de antaño de la estancia. En www.muralesyvinilos.com/fotomurales/mapas puedes encontrar diferentes propuestas que mejor se adapten a tu estilo y a tu personalidad.

Para los más modernos, también existen mapas originales compuestos sólo de letras que configuran la perfecta forma la geografía mundial.

Vinilo de un mapa a base de letras, de muralesyvinilos.com