El famoso actor indio Sanjay Dutt se da un baño de masas en su debut político

El actor, que fue condenado en 2007 a seis años de prisión por tenencia ilícita de armas y se encuentra en libertad bajo fianza, se dio hoy un auténtico baño de masas en la ciudad de Lucknow, capital de la región más poblada de la India, la norteña Uttar Pradesh, según la agencia IANS.

La candidatura de Dutt podría no hacerse efectiva debido a sus antecedentes penales, un hecho al que el secretario general de la formación, Amar Singh, restó importancia hace algunos días.

"Aunque no pueda concurrir, será nuestra estrella durante la campaña", dijo Singh la semana pasada.

Dutt, quien apareció ante sus seguidores a bordo de un vehículo descubierto y acompañado por su esposa Manyata, dijo que pensaba poner en práctica la ideología del 'Mahatma' Gandhi.

"Amo a la gente de aquí y haré lo que esté en mi mano para trabajar por ellos", dijo Dutt, citado por IANS.

Además, el actor se comprometió a repartir "abrazos mágicos" a los ciudadanos, en referencia a su personaje en la saga cinematográfica "Munna Bhai", en la que Dutt interpreta a un gángster de Bombay que trata de mejorar el mundo dando abrazos.

La estrella aseguró anoche en una rueda de prensa que su entrada en la política no iba a acarrear un conflicto familiar, ya que su hermana menor, Priya, es diputada en el Parlamento por el Partido del Congreso, que gobierna el país.

"No hay disputa en la familia de ninguna clase por este asunto", dijo la estrella, quien agregó que en el caso de que su hermana le haya criticado no tiene ningún inconveniente en perdonarla.

"Cuando éramos pequeños cometíamos errores y mi padre siempre nos perdonaba", dijo el actor.

El padre de Sanjay y Priya, Sunil Dutt, ya fue diputado con el Partido del Congreso e incluso, ministro en el Ejecutivo de Manmohan Singh, que expira esta primavera.

La popularidad de Dutt es atribuida a su turbulento pasado, en el que se mezcla la vinculación con el mundo del hampa y las drogas con la trágica y temprana pérdida de su madre.

Con cada nuevo éxito taquillero, Dutt se ha empeñado durante años en convencer al público indio de que dentro del grandullón de ojos tristes que aparece en el celuloide se esconde un niño inocente y travieso.