La defensa del matador ha dado a conocer el informe de defensa de su cliente en donde se expone, entre otros puntos, que en el momento de la colisión José Ortega Cano conducía a una velocidad inferior a 90 kilómetros por hora y que no había ingerido bebidas alcohólicas, con lo que piden la libre absolución por la muerte del conductor del coche con el que colisionó, Carlos Parra.

El programa de Ana Rosa ha tenido acceso al texto elaborado por los abogados del torero. En él exponen que su cliente en el momento de la colisión con el vehículo conducido por Carlos Parra, que perdió la vida en el accidente, conducía dentro de los límites de la velocidad reglamentaria.

También niegan que el diestro hubiese consumido ningún tipo de bebida alcohólica esa tarde. No obstante, solicitan la anulación de los análisis practicados por el Insituto Nacional de Toxicología alegando que las transfusiones que se le practicaron fueron de uso terapéutico.

Los abogados exponen que Ortega Cano se encontraba en tratamiento médico por arritmias cardiacas y por eso tuvieron que practicársele dichas trasfusiones para salvarle la vida.

Así pues, solicitan la comparecencia en el juicio de un doctor especialista en arritmias para que concrete la influencia que esta patología pudo tener en el suceso.

También han pedido que testifiquen el bombero que rescató del coche al viudo de Rocío Jurado y al conductor de la ambulancia para que acrediten el estado en el que se encontraba el torero instantes después de la colisión.

A la espera del juicio, tanto el diestro como la familia de Carlos Parra acatarán lo que dictamine la justicia.