Como sus diseños, Ágatha Ruiz de la Prada es única en su especie. La diseñadora madrileña, que se separó del periodista Pedro J. Ramírez a finales de 2016, ha saltado a la palestra de nuevo por unas declaraciones y unas fotos de lo más inquietantes.

Porque lo de Ruiz de la Prada siempre ha sido originalidad, hasta para ir a firmar un divorcio, y así lo ha relatado en exclusiva para la revista ¡Hola!. La ganadora del Premio Nacional de Diseño de Moda ha contado que el día que fue a finiquitar la separación con Pedro J. acudió tapada de pies a cabeza ataviada con un burka. El tabloide del corazón ilustra el reportaje con las imágenes de Ruiz de la Prada con la vestimenta, un regalo de unos amigos que viajaron a Afganistán.

"Firmé mi divorcio con un burka porque no quiero que mi ex me vuelva a ver", subtitula la publicación, en la que la diseñadora desgrana sus razones. "Sólo se me veían los ojos. ¡Fue tan alucinante! Aunque ya sabía que no íbamos a estar en el mismo cuarto, porque el divorcio se firmaba en salas separadas, me vestí por si nos llegábamos a cruzar en algún momento. Me daba igual que la gente me pudiera reconocer o no. Lo único que yo quería era que él no volviera a verme nunca más".