Actor. Ha ido cumpliendo años ante el público, como hijo mayor de los Alcántara, la familia televisiva de Cuéntame cómo pasó. Pero este madrileño de 30 años ha ampliado horizontes. En el teatro, junto a Belén Rueda en 'La caída de los dioses', y en cine, en filmes alejados del consumo fácil. El último, un drama a contracorriente, 'De tu ventana a la mía'.

¿Qué enviaría desde su ventana a la de alguien querido?

Lo que necesite en cada momento, pero sobre todo energía. No hay nada peor que quedarse quieto.

¿Y qué le gustaría tirar por la ventana?

Montones de las cosas que guardo. Soy muy coleccionista, aunque últimamente intento moderarme.

Sus actrices imprescindibles...

Alicia Hermida, por su energía y buenas enseñanzas; Cecilia Freire, por su constancia y visión de la profesión, e Irene Escolar, por su madurez y pasión profesional.

¿Plató de cine, televisivo o escenario?

Estoy teniendo suerte y los voy alternando. Pero cuando llevo tiempo en uno empiezo a echar de menos el otro.

¿Qué hace cuando tiene un rato libre?

Si estoy trabajando, repasar relajado y ver pelis y referencias que me valgan. Ahora ando poniéndome las pilas con el inglés. También me gusta escribir. Me libera.

¿Qué libro recomienda?

'Damian', de Herman Hesse.

¿Adicto a las series?

Sin duda. Me gusta 'Iluminada' sólo por ver a Laura Dern, 'American Horror Story', porque me encanta el género y es la novedad. 'The Office' porque amo ese reparto y ese humor, 'Dexter', 'Bored to Death'. ¡¡¡Muuuchas!!!

Y en cuanto a música , ¿a quién le gusta escuchar?

Clásicos como The Doors, Bowie o Chris Isaack. Bandas sonoras como 'Trainspotting', 'Romeo y Julieta', 'Corazón salvaje', 'Drive'. Y The Cardigans, Travis, Goldfrapp y gente más pop como Madonna. De todo un poco.

¿Cómo sería su velada perfecta?

Con buena conversación, muchas anécdotas, bastantes risas y mucha química. Y algo de comer.

¿Por dónde andan sus gustos gastronómicos?

En muchas direcciones. Comer me apasiona. Me encanta la comida tailandesa y las hamburguesas del Home Burger. La comida casera de Casa Fidel, en el centro de Madrid. La comida china del restaurante del parking de la plaza de España, también en Madrid …

Si sale de copas, ¿qué le gusta beber?

Suelo tomar vino blanco o cerveza y después gin-tonic. Pero soy más de reuniones caseras con mis amigos.

Si se pierde, ¿dónde habría que buscarle?

En Nueva York. Me encanta perderme en sus calles. Tiene lo que más me gusta, me hace desconectar y me inspira.

Si se enfada, ¿cómo hay que tratarle?

Hay que dejar pasar un rato y luego dialogar.

¿Qué le subleva?

Que nos tomen el pelo, la táctica de empeorar todo para que no sepamos por dónde quejarnos. La falta de valores. La mala educación. La dejadez. Que me hagan esperar. Los reality. Y sobre todo, el clima de pánico-crisis.

¿Qué admira en los demás?

Admiro a la gente con iniciativa; emprendedora. La que apuesta a ciegas por lo que cree.

Su mejor momento del día es …

Cuando estoy en la cama tumbado, con rayos de sol entrando por la ventana, en la mejor compañía, y compartiendo relax y aficiones.

¿Dónde encuentra sus colores y sus olores favoritos?

En los parques. De hecho, descubrí por casualidad difusores para casa con aromas a césped, trébol y naturaleza, que me apasionan, ja, ja, ja.