Tengo un gato y tiene los ojos rojos. Al principio pensaba que era normal y que obedecía a su estado nervioso, pero últimamente le molesta y no para de rascarse. ¿A qué puede deberse?

Para los gatos los ojos son parte de su lenguaje. Por ejemplo, si presenta sus pupilas contraídas significa que está en tensión pero, por el contrario, si las tiene dilatadas es señal de sorpresa. Sin embargo, por lo que nos dices, no parece parte de su lenguaje sino, más bien, algún tipo de problema. Piensa que las posibilidades son muy amplias. Puede tratarse desde, simplemente, algo que se le ha metido en el ojo, pasando por una alergia, una conjuntivitis, un glaucoma motivado por una subida de presión intraocular o muchas otras patologías. Las posibilidades, como ves, son enormes y el problema principal es que, al molestarle o picarle, tu gato se intente rascar con su pata pudiendo arañarse, lo que agravaría aún más el problema. Lo mejor, por tanto, es que, cuanto antes, acudas a tu veterinario para que pueda diagnosticar lo que le ocurre y actuar en consecuencia. En estos casos un rápido diagnóstico es esencial.

Raúl Mérida y Tamara Simón