Frescos y versátiles, los vestidos son una de las prendas más apreciadas para el verano. En todos sus tamaños y formatos, colores y estampados, llega pisando fuerte para convertirse en una prenda que no puede faltar en tu armario. Además, eligiendo los complementos adecuados puedes convertir un vestido de playa en un look perfecto para la noche.

Pero empecemos por el principio: ¿Qué vestidos se llevan esta temporada? Se hace obligado empezar por uno de los estampados ganadores de 2013: las rayas. El print marinero ha desembarcado en vestidos de verano cortos y 'midi', de tirantes o de manga corta y de silueta 'evasé' o tubo. Las posibles combinaciones son múltiples, pero el resultado siempre será el mismo: un look divertido e informal.

En cuanto a colores, los vestidos de la época estival eligen tonos tan llamativos como el amarillo, el blanco, el esmeralda y el naranja. Si quieres un toque 'naif', decántate por estos colores en versión pastel y si eres una chica que rebosa energía, opta por las tonalidades flúor, combinaciones que contrastan a la perfección con una piel morena.

La tendencia de la moda a mirar hacia atrás no es nueva y esta temporada queda patente la influencia de los años 40 y 60 en unos vestidos de verano de aires retro-lady por una parte, y totalmente pop, por otra.

Los complementos adecuados

La crisis nos obliga a ser imaginativa en todos los aspectos y más cuando hablamos de moda. Por eso debemos tener especial cuidado cuando elegimos los complementos que nos puede ayudar a convertir un look informal en un modelo perfecto para una fiesta de verano.

Las piezas fundamentales para esta conversión es el bolso y los zapatos. Un bolso sobre y unos zapatos peep toe son la apuesta segura. Si añades un cinto, a juego o con los zapatos o el bolso, un collar estampado y unos pendientes de noche, la magia el cambio se habrá hecho realidad.