Cuando notamos nuestro rostro con signos de agotamiento, recurrimos a los correctores de ojeras al maquillaje de tono subido, a los coloretes. Sin embargo, si se hace ejercicio para tonificar el cuerpo ¿Por qué no hacerlo también para la cara?

Hay personas que practican deporte para conseguir un cuerpo perfecto, aunque también hay otras que requieren del bisturí para modificar aquello que no les gusta. El rostro está formado igualmente por músculos, por lo tanto, el ejercicio facial ayuda a conseguir una piel tersa y bien cuidada.

Con este ejercicio, no desaparecen todas las marcas de la piel, pero ayuda a mantenerla firme, evitando así la aparición prematura de la piel flácida. Además, este ejercicio resulta placentero y relajante.

La técnica es aplicada en todas las zonas de la cara: párpados, mejillas, nariz, pómulos, frente y boca son masajeados y estirados reactivando los tejidos y mejorando la salud de nuestra piel.

Si empleas el fitness facial con frecuencia, será de poca importancia que olvides aplicarte tu corrector de ojeras:

-¡Morritos hacia fuera!

Pon tus labios como si fueras a dar un beso durante unos segundos y repite el ejercicio varias veces, verás como tu cuello se estira.

-Intenta tocarte la nariz con la lengua

Conseguirás estirar completamente tu cuello y conseguirás una papada firme.

-Abre la boca

Con la boca abierta al máximo conseguirás estirar todos los músculos de tu cara.

-Achina los ojos y ciérralos con fuerza

Ayudate con los dedos para estirar los ojos

-Pon cara fea

Aprieta con fuerza todos tus músculos de tu cara mientras cierras los ojos