Cuando el año da sus últimos coletazos y hemos dejado atrás los grandes premios, festivales de cine, semanas de la moda y las fiestas con más glamour, es muy complicado que un look impresione. O eso es lo que nos creíamos. A punto de que acabe 2016, la Reina Letizia ha dado una lección de estilo con el que será uno de los últimos looks del año.
A veces regia hasta el extremo y otra mucho más arriesgada, la Reina ha vuelto a demostrar por qué está considerada una de las mujeres más admiradas por su estilo tanto en nuestro país como en el resto, esta vez con un vestido de lentejuelas de Nina Ricci, firma española que pertenece a Puig y que la Reina empezó a usar cuando contrató a su estilista Eva Fernández hace un par de años. Con largo midi y con rayas verticales en azul, amarillo, naranja y negro, el vestido de la Reina está llamado a ser uno de los mejores looks del año.
Pero el vestido no es ha sido lo único con lo que ha impactado, su look beauty también fue todo un acierto. Se decantó por una melena peinada hacia atrás con tupé y ojos ahumados en azul y malva.
