Menos del 2% de los enfermos de obesidad, unos dos millones de españoles, pasa por quirófano para someterse a una operación, casi siempre de reducción de estómago, y curar así su enfermedad, un porcentaje que los cirujanos bariátricos temen se reduzca aún más debido a los recortes financieros que sufre la sanidad pública.

"Las restricciones -que así las llama el doctor Aniceto Baltasar, artífice de la primera operación de este tipo "publicada y referenciada" en España, realizada hace ahora 35 años- van a suponer un descenso considerable" en el número de intervenciones.

El doctor Baltasar, cirujano en la clínica San Jorge de Alcoy (Alicante), conoce el caso de un hospital público barcelonés, cuyo nombre no quiso citar, en el que antes se operaba mañana y tarde, casi todos los días de la semana, y ahora sólo por la mañana y menos días.

Una situación que preocupa al doctor Antonio Torres, jefe de cirugía en el Hospital Clínico de Madrid, además de catedrático en la Complutense y presidente mundial de los cirujanos bariátricos, para quien una operación de reducción de estómago supone, además de beneficios para el enfermo, "una inversión de futuro" para la sanidad pública.

Y ello es así porque evita la presencia constante de este tipo de enfermos en las consultas médicas, dadas las muchas otras patologías que van unidas a su obesidad (diabetes, hipertensión, tumores, problemas óseos...).

En la actualidad, y según datos facilitados hoy en rueda de prensa, en España se realizan al año entre 6.000 y 7.000 intervenciones de cirugía de la obesidad, un número "del todo insuficiente", si se tiene en cuenta, entre otras cosas, que el 15% de la población española tiene problemas de sobrepeso, porcentaje que no deja de crecer año tras año, especialmente en niños y adolescentes.

Hace cuatro años -son los últimos datos de que se dispone- el 54% de las operaciones se realizaban en hospitales públicos, porcentaje que no habría variado mucho desde entonces. El coste medio de una intervención de este tipo en la sanidad pública está en torno a los 5.000 euros.

"La falta de conciencia sobre el grave problema que supone la obesidad, así como la desinformación que existe al respecto, son algunas razones -en opinión del doctor Torres- por las que a día de hoy el número de intervenciones de cirugía bariátrica no ha crecido".

La cifra irá a más, insistió, "en el momento en que todos nos concienciemos de que un peso elevado es más que un problema estético, sino que afecta a nuestra salud y acorta la vida a quienes lo padecen".

Los enfermos que pasan por el quirófano, con una garantía de éxito que supera el 95%, según aseguran los profesionales de esta cirugía, viven de media unos 15 años más que aquellos que no se operan. Está estudiado, como está estudiado también que la cirugía de la obesidad reduce el riesgo relativo de muerte en un 89%.

Todos los consensos médicos indican que las personas susceptibles de ser intervenidas quirúrgicamente para paliar su obesidad son aquellas con un índice de masa corporal -la relación entre peso y altura- superior a 40.

Era el caso de Cristóbal Medina, un consultor de 49 años que hace cuatro, cuando decidió operarse, pesaba más de 140 kilos. Hoy, con la mitad, su vida es otra, es "la de una persona normal y corriente. Como de todo, hago de todo,...", aunque, eso sí, es muy disciplinado y se cuida todo lo que puede.

Un éxito personal logrado gracias a la cirugía y a un equipo multidisciplinar de profesionales de la medicina que han logrado que este "niño gordito, este adolescente gordo y este adulto obeso" sea hoy una persona feliz, delgada y sana, en cuyo armario cuelgan prendas "de una talla normal, no como antes. En Navidad -bromea- cuando me regalaban algo de ropa siempre me estaba pequeño".

El doctor Juan Carlos Ruiz de Adana, cirujano de la unidad de obesidad mórbida en el Hospital Universitario de Getafe (Madrid), destacó el "nivel de excelencia" que hay en España en esta especialidad médica, si bien hizo hincapié en que los recursos son "insuficientes" para satisfacer la demanda de los enfermos.

Ruiz de Adana se refirió a lo imprescindibles que son para los pacientes las unidades multidisciplinares que hay en casi todos los hospitales públicos, si bien reconoció que "no ha dado tiempo a organizarlas de manera más efectiva". Teme que los recortes impidan avanzar en ello.

Tres son los tipos de cirugía bariátrica que se practican en España: restrictiva, malabsortiva y mixta, la más común, ya que se aplica en el 65% de los casos. Las tres son mínimamente invasivas, ya que se realizan por vía laparoscópica.