Mujer y hombre comparten al cincuenta por ciento las causas de la infertilidad, considerada una enfermedad por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que afecta al 15 por ciento de las parejas españolas en edad fértil. En muchas ocasiones aún se asocia infertilidad masculina con impotencia, y en los casos en los que se diferencian, "el sentido de culpabilidad de no estar a la altura desde el punto de vista masculino, todavía pesa a los hombres como una losa", ha señalado la doctora Rocío Núñez, embrióloga y subdirectora de la Clínica Tambre.

No obstante, la mentalidad está cambiando y las parejas entienden que tener un hijo es un proyecto de dos, en el que ambos tienen que aportar. Este es uno de los principales datos de un estudio, realizado por Madison Market Research para los laboratorios Merck, con el objetivo de conocer la implicación del hombre en el proceso de reproducción.

La encuesta, realizada a 1.227 hombres y mujeres de todas las comunidades autónomas, concluye que más del 85 por ciento de la población española cree que tener un hijo es importante para alcanzar la satisfacción personal en la vida. Pero no siempre ese objetivo se logra con facilidad. Y a pesar de que la investigación médica se ha centrado principalmente en la infertilidad femenina, el factor masculino está cobrando cada vez más importancia.

En la mayoría de las ocasiones no existe una respuesta concreta a la pérdida de la calidad del semen observada en las últimas décadas entre los hombres occidentales, aunque, según ha señalado la doctora Núñez, se sabe que los varones con una cantidad reducida de espermatozoides tienen menor proporción de ácido D-aspártico. Recientes estudios culpan también de ello al estrés oxidativo asociado a factores ambientales (contaminantes, agentes químicos tóxicos, radiación...) y al estilo de vida (tabaco, alcohol, mala alimentación, vida acelerada, falta de sueño...).

"Últimamente se está viendo que la ingesta de antioxidantes puede ayudar a que la calidad de los espermatozoides mejore". Por ello, Merck ha lanzado un complemento alimenticio que contiene ácido D-aspártico, coenzima Q10 y zinc, este último un mineral esencial en el organismo humano que contribuye, según el laboratorio, a la protección de las células frente al daño oxidativo. Se ha comprobado que esos componentes por separado logran aumentar la cuantía y calidad de los espermatozoides y por primera vez se han unido en un producto.

La doctora Núñez ha destacado la importancia de que la participación del varón no sea solo la de "poner la muestra de semen" para su análisis cuando no se logra un embarazo, sino que se implique más, lo que "hace que la pareja se una y colabore en el proceso reproductivo".

En la responsabilidad del varón ha incidido el cantante Bertín Osborne, imagen del producto, quien se ha quejado de que la sociedad machista en la que aún vivimos ha llevado al hombre a considerar que "estamos por encima del bien y del mal y que lo nuestro era empujar". El hecho de que la mitad de los casos de infertilidad sean responsabilidad del varón "debe hacernos reflexionar a todos", ha señalado el artista, quien ha recomendado el suplemento alimenticio, que él no va a tomar al haber tenido ya seis hijos.