El 'síndrome postvacacional' no es el único problema al que se enfrentan los trabajadores al finalizar sus vacaciones, sino que una mala calidad visual puede hacer que su regreso sea aún más duro y dificultar su reincorporación a la jornada laboral.

Durante el verano, la vista está expuesta a grandes esfuerzos y situaciones, como largas horas de sol en playas o piscinas, que pueden generar situaciones de estrés y cansancio al ojo al volver al trabajo, ya que estos han perdido la costumbre de utilizar su posición cercana.

Para disminuir el esfuerzo que supone adaptarse nuevamente a este tipo de visión, la Asociación Visión y Vida ofrece varias pautas para ayudar a las personas a este periodo de acomodación.

1.- Revisar la visión. Al volver a trabajar delante de las pantallas de un ordenador, es necesario que la visión sea correcta para disminuir el esfuerzo que realizan los ojos. Por ello, es preciso revisar la visión y utilizar la graduación más actualizada para evitar la fatiga ocular.

2.- Postura adecuada. Sentarse correctamente en la silla, con la espalda erguida, apoyada en la silla y a unos 50 centímetros de la pantalla ayudará a disminuir el cansancio ocular.

3.- Evitar reflejos. Si la pantalla tiene una luz molesta para la vista, los ojos harán un sobreesfuerzo a la hora de trabajar, por lo que hay que prevenirlo utilizando filtros de pantalla o lentes que reducen la fatiga visual. Además, es recomendable usar una buena iluminación tanto en casa como en el trabajo.

4.- La 'regla del 20-20-20'. Este método es eficaz para descansar los ojos y consiste en que cada 20 minutos de trabajo hay que descansar 20 segundos mirando a 20 pies de distancia o a unos cinco o seis metros, parpadeando varias veces.

5.- Prevenir el ojo seco. Es aconsejable emplear humectantes oculares para aliviar cualquier sensación de sequedad, especialmente si se usan lentes de contacto.

6.- No olvides parpadear. Al estar delante de la pantalla, el parpadeo disminuye en un 70 por ciento. Además, cuando se está frente a un ordenador, el parpadeo es más suave y puede provocar que la lágrima no se distribuya correctamente por todo el ojo.

7.- Acudir a un profesional. Es necesario pedir ayuda a un experto para adoptar soluciones y minimizar los síntomas durante una larga jornada laboral, garantizando el máximo bienestar visual.