La mitad de los usuarios usan la misma contraseña para acceder a todos los servicios que utilizan en internet: bancos, correos electrónicos o redes sociales.

Y solo uno de cada cinco usuarios le da a esas contraseñas la importancia que realmente tienen para acceder a esas plataformas digitales de una forma completamente segura y evitar que puedan ser accesibles para los ciberdelincuentes o a través de la "internet profunda".

Los datos los han puesto este jueves de relieve diversas empresas especializadas en ciberseguridad con motivo de la celebración del "día mundial de las contraseñas" que programan las compañías del sector tecnológico el primer jueves de mayo para llamar la atención sobre la importancia de disponer de contraseñas seguras.

Un estudio realizado por la empresa especializada en seguridad informática Panda Security revela que existe una dicotomía entre la importancia que los españoles dan a la ciberseguridad y el uso que hacen de sus dispositivos en los entornos familiares.

Según los datos facilitados por esta empresa, el 90 por ciento de los usuarios considera "robustas" sus contraseñas, generalmente una combinación de ocho dígitos y que alternan números y letras, pero en realidad no lo son y pueden ser descifradas fácilmente.

La empresa Entelgy ha subrayado por su parte que la biometría permite reforzar o sustituir a una contraseña, y ha destacado la importancia de que las claves sean "complejas, únicas y privadas".

La proliferación de cuentas, aplicaciones, redes sociales o sitios web provoca, según esta empresa, que los usuarios tiendan a crear claves sencillas y a repetirlas en diferentes cuentas para no olvidarlas.

Para disponer de contraseñas "robustas" aconsejan claves con una longitud mayor a ocho caracteres (que incluyan letras, números y signos), modificar la contraseña periódicamente, activar la doble autenticación y usar cuando sea posible soluciones de biometría (huella dactilar, iris o reconocimiento facial).