Asusta el fuego de cerca y también de lejos. Restos en llamas caen de una vivienda de Granada. A distancia, visible, una gran columna de humo negro. Llegan los bomberos a la zona. Está ardiendo la terraza de un quinto piso. Dentro, una mujer de 80 años y su hijo. Éste habría estado cargando unos mecheros con gasolina cuando una chispa ha prendido la ropa que estaba tendida. Los dos han tenido que ser trasladados al hospital. Ella con una crisis de ansiedad y él por inhalación de humo. La policía ha desalojado a los vecinos, que han salido con lo puesto. Más de dos horas han estado pegados al teléfono. Preocupados. Sin poder acercarse a sus casas. Ya de noche, los bomberos, finalmente, han conseguido extinguir el incendio.
