Faltan algo más de 24 horas para que Portugal y Francia se vean las caras en la final de la Eurocopa, y en Lisboa ya están preparándolo todo para la gran cita. En la plaza del Comercio de la capital se están instalando varias pantallas gigantes en donde poder seguir el encuentro. Además, tiendas, restaurantes y casas lucen con orgullo la bandera del país.