La transformación del Convento de San Agustín en la que será la sede definitiva de la Biblioteca Pública del Estado de Málaga culminarán antes de que termine el próximo año. Es el plazo que se marca el Ministerio de Cultura para acabar una gran obra que arrancó en 2022 y que tuvo que adaptarse a los restos arqueológicos de gran valor que emergieron durante los trabajos.