Zarparon del puerto de Ceuta en una narcolancha, la cargaron en alta mar de garrafas que contenían hachís y pusieron rumbo a la playa de Guadalmina, en Marbella, para desembarcar la droga. Pero fueron sorprendidos por los medios aéreos de la Policía Nacional, cuyos agentes identificaron la embarcación que horas antes había visto salir la Guardia Civil desde el otro lado del Estrecho.