La erupción del volcán de La Palma ha supuesto una auténtica ruina para muchos agricultores, para toda esa gente que depende de sus tierras para ganarse la vida. En su avance imparable, las coladas de lava han cubierto ya un total de 93 hectáreas de cultivos. Los más afectados son los plataneros con 36 hectáreas de fincas arrasadas. Pero no son los únicos, también hay siete hectáreas de aguacate destruidas y hasta 33 viñedos completamente destrozadas.