Los gritos de la madre fueron los que alertaron a los vecinos. Rápidamente, una vecina trasladó en su coche al menor, de cinco años, y a su padre hasta el centro médico de Lucena, en Córdoba. Los servicios de emergencias no pudieron hacer nada por salvar su vida. La agresión se produjo de madrugada, sobre las tres de la mañana. El menor dormía con sus padres, guardeses de una finca. El perro, de raza pastor belga malinois, pertenece a los propietarios. Ahora, el animal se encuentra bajo custodia policial a la espera de que la justicia decida qué hacer con él.