La Guardia Civil no ha conseguido sacarle una confesión. Ramón 'el Manitas', tapado con una capucha marrón, ha negado reiteradamente que tenga algo que ver con la desaparición de Esther López. "Lo conozco desde hace mucho y dice que es inocente", asegura Lorena Iglesias, su abogada. Después de casi tres días detenido y de intensos registros en los que los agentes han peinado la casa en busca de pruebas, él ha mantenido su inocencia. Hasta el extremo de iniciar una huelga de hambre en señal de protesta. Ante esta situación los agentes han decidido llevarle al juzgado y el magistrado, con la documentación aportada por los investigadores, ha decidido prolongar su arresto 72 horas más para someterle a una mayor presión. Mientras, la búsqueda de Esther no se detiene. Un día más los buzos de la Guardia Civil peinan el río Duero tratando de localizar de su cuerpo.