­El Ayuntamiento de Vélez Málaga rehabilitará el edificio de la antigua estación de ferrocarril de su casco histórico, localizada en la terminal no abierta de la segunda fase del tranvía, al objeto de convertirlo en nueva estación de autobuses. El Consistorio indicó que la inversión ascenderá a 243.000 euros, procedentes de la Diputación de Málaga, dentro del Plan Recupera 2011-2015.

Las instalaciones a reformar se construyeron originariamente en las primeras décadas del siglo XX, a raíz de que se pusiera en funcionamiento el antiguo tren que unió la capital malagueña con el término municipal granadino de Zafarraya. Dicho servicio permaneció en funcionamiento hasta hace medio siglo. El alcalde, Francisco Delgado Bonilla (PP), argumentó que esta actuación fue «muy demandada por vecinos y colectivos culturales». Acompañado por la edil de Urbanismo, Infraestructuras y Servicios Operativos, Concepción Labao, y los técnicos Rubén Heredia y Arturo Ruiz, el regidor avanzó ayer que las obras arrancarán en febrero de 2015, con un plazo de ejecución de cinco meses que permitirán que las instalaciones estén listas para el próximo verano.

«Los trabajos de reforma que vamos a llevar a cabo en este edificio, ubicado en la zona de La Estación, permitirán dotar al inmueble de una amplia sala de espera para los viajeros de la estación de autobuses, una cafetería y unos aseos». Delgado Bonilla apuntó su sorpresa porque en 2009, «cuando el anterior gobierno recepcionó las obras de la segunda fase del tranvía, no exigió la rehabilitación de este edificio de la historia ferroviaria de Vélez Málaga».

Asimismo, insistió en la «gran apuesta del gobierno del PP en materia cultural» y de «recuperación del patrimonio». El arquitecto municipal, Rubén Heredia, indicó que el edificio se va a dividir en tres módulos, el central se dedicará a la sala de espera -se convertirá en el más amplio del nuevo inmueble- y los laterales a la cafetería y los aseos.

«Se va a demoler el forjado de la planta primera dando como resultado un espacio de doble altura en el que las ventanas de la planta alta se convierte en lucernarios que dejarán pasar la iluminación natural a través de una caja de luz», finalizó el técnico.